Una red transnacional de reclutamiento ha arrastrado a cientos de exmilitares colombianos a la guerra civil de Sudán bajo la fachada de lucrativos contratos en los Emiratos Árabes Unidos. AFP revela cómo estos mercenarios, codiciados por su experiencia en combate, han terminado reforzando las filas de las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) —acusadas de genocidio en Darfur— en una operación de lucro y silencio bajo el mando de empresarios sancionados por Estados Unidos.