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El ecosistema colombiano de las fintech –empresas tecnológicas que prestan servicios financieros con una operación cien por ciento digital– es uno de los más fuertes de Latinoamérica, no en vano ha sido catalogado por firmas como Finnovista como el tercero más importante de la región por detrás de Brasil y México. En la actualidad, de acuerdo con Colombia Fintech, existen más de 300 plataformas de este tipo, la mayoría del segmento préstamos.
En este contexto, las fintech se han convertido en una alternativa para quienes desean acceder a créditos educativos para financiar sus estudios de posgrados y diplomados. Sin embargo, como aclaró a EL COLOMBIANO Pablo Santos, CEO de Finaktiva, una de las fintech más reconocidas del país, la especialidad de la mayoría de estas plataformas son las empresas, no las personas, por tanto antes de solicitarles un préstamo conviene revisar el enfoque de cada una.
EL COLOMBIANO contactó a dos de las fintech colombianas que sí ofrecen recursos para financiar estos estudios: Finky y Credity.
La primera existe desde junio de 2020 y en palabras de Liliana Beltrán, su directora general, fue creada para ofrecerles la posibilidad de acceder a estos recursos a estudiantes que por su situación socioeconómica no cumplen los requisitos que les exigen bancos u otras entidades financieras, como historial crediticio o una garantía que respalde su deuda.
“Nos especializamos en ofrecer cupos de crédito para estudiar este tipo de programas en instituciones de educación superior que ofrezcan matrículas no superiores a los diez millones de pesos y con las cuales tenemos convenio para que el estudiante cancele su matrícula en cuotas”, explica Beltrán.
La directora hace énfasis en que es un cupo de crédito y no un crédito como tal, ya que no se realiza un desembolso. Además, asegura que siete de cada diez solicitudes son aprobadas y “no pedimos codeudor”, pero a cambio el estudiante debe convertirse en asociado de Coophumana, una cooperativa que hace las veces de afianzamiento para asegurar el cumplimiento de la obligación.
El pago de los aportes solidarios incluye un valor por el servicio de Finky, que es devuelto al final cuando se termina de cancelar las obligaciones del cupo de crédito.
El precio mínimo de la matrícula debe ser de 950.000 pesos y el valor máximo de 10 millones. Algunas de las instituciones con las cuales Finky tiene convenio son la Fundación Universitaria del Área Andina, Uniempresarial, Tecnológico Minuto de Dios, la Fundación Universitaria San Mateo, entre otras.
Juan Tomás Leal es el director general y cofundador de Credity, una fintech creada en mayo de 2018 y que se ha especializado en fomentar el acceso a la educación superior a través de las soluciones tecnológicas financieras. Esa visión la comparten con el Banco Pichincha, entidad con la cual tienen un convenio para gestionar estas solicitudes por parte de los estudiantes interesados y establecer contacto directo con las instituciones de educación superior con las cuales la plataforma tiene convenio.
Su operación es similar a la de Finky: la institución le asigna al estudiante un cupo de crédito y ellos se encargan de gestionar los recursos. “Estamos presentes en más de 30 universidades del país. Los términos del crédito son muy flexibles, pueden ir desde lo que dura el semestre académico y alargarse hasta los 24 meses incluso, aunque se enfocan más en el corto plazo. Tenemos una tasa de interés de 1,8 % mes vencido”, explica Tomás Leal.
Uno de los atributos que el director general destaca de su fintech es que en menos de 24 horas un estudiante puede tener su crédito aprobado, firmar y recibir el desembolso.
Los montos de crédito disponibles en esta plataforma van desde los 500.000 hasta los 30 millones de pesos, dependiendo de la institución.
Para acceder a los recursos los estudiantes deben suministrar una información personal y académica básica, para ser estudiado por la entidad y determinar si el crédito es o no aprobado. En las líneas de corto y mediano plazo no se requiere un codeudor o avalista, pero sí es indispensable en la de largo plazo.
En los tres años que lleva en operación, Credity ha otorgado más de 50 mil créditos educativos, la mayoría en Bogotá y Medellín, aunque la cobertura ha sido nacional.
Tanto Finky como Credity ofrecen en sus sitios web simuladores de crédito en los cuales las personas pueden hacer el ejercicio y determinar el valor probable de sus cuotas, de acuerdo con el monto que requieren, y así mismo verificar las condiciones que les son exigidas para acceder a estos recursos.
Estas plataformas constituyen opciones para respaldar sus metas profesionales y personales