Un reciente estudio del Instituto Humboldt, a través del proyecto GEF Páramos para la vida, en convenio con la Universidad del Rosario, ha revelado el ranking de los páramos con mayor área quemada en Colombia en las últimas dos décadas.
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Esto, a partir del análisis de imágenes satelitales y registros de anomalías térmicas, cuya investigación proporcionó una visión detallada sobre el régimen de incendios en los ecosistemas en cuestión, que no está de más decirlo, son esenciales para la biodiversidad y la regulación del agua.
“A pesar de que algunos páramos figuran en los últimos lugares en el índice de prioridad, es importante enfatizar que todos requieren acciones de gestión continua para prevenir la degradación de estos ecosistemas estratégicos”, señaló José Muñoz, investigador del Centro de Soluciones Basadas en la Naturaleza del Instituto Humboldt.
Los páramos más afectados por incendios
El estudio determinó que el complejo de páramos de Perijá encabeza la lista con el 33,8 % de su superficie afectada por incendios entre los años 2000 y 2022.
En segundo lugar se ubica Chiles-Cumbal con un 21,4 %, seguido de Tota-Bijagual-Mamapacha con un 16,8 %. El Altiplano Cundiboyacense ocupa el cuarto lugar con un 16,3 %, mientras que Cruz Verde-Sumapaz cierra el ranking con un 14,6 %.
Cabe aclarar que este ranking se realizó para los 37 complejos de páramos con los que cuenta el país. Posteriormente, el análisis se enfocó en los 16 complejos de páramos en los que el proyecto GEF Páramos para la vida tiene implementaciones.
José Muñoz destacó la importancia de estos hallazgos: “Este ranking no solo permite visibilizar las áreas más afectadas, sino que también orienta los esfuerzos de prevención y manejo del fuego en los páramos colombianos”.
Hacia una mejor gestión de los incendios en páramos
Además del análisis de área quemada, la investigación exploró el régimen de incendios en los páramos colombianos, considerando variables como la frecuencia, los promedios anuales y la estacionalidad de los incendios.
Según los resultados, aunque la incidencia de incendios en estos ecosistemas ha mostrado una tendencia a la baja, aún persisten desafíos en su control y prevención.
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“Los resultados muestran cómo, a lo largo del tiempo, la ocurrencia de incendios ha disminuido, lo que sugiere que los esfuerzos de supresión han sido efectivos. Sin embargo, es fundamental entender cómo esta reducción impacta el funcionamiento de los ecosistemas de páramo”, indicó Jonathan Julián Díaz Timoté, investigador de la Universidad del Rosario.
Brigadas comunitarias: una estrategia para la protección de los páramos
Como parte del proyecto GEF Páramos para la Vida, se han conformado brigadas voluntarias contra incendios en 16 complejos de páramos en las regiones de Boyacá, Cauca, Cundinamarca, Tolima, Nariño y Santander.
Estas brigadas no solo actúan en la prevención y monitoreo de incendios, sino que también fortalecen sus capacidades mediante capacitaciones en identificación de riesgos, primeros auxilios y atención de emergencias.
“Las brigadas comunitarias son grupos voluntarios de hasta 14 personas. La idea es vincular a comunidades y actores locales que participen en las estrategias municipales para la respuesta a emergencias por incendios forestales”, concluyó Muñoz.
Este estudio ofrece una radiografía del impacto de los incendios en los páramos y proporciona herramientas clave para fortalecer la gestión del fuego y la conservación de estos ecosistemas vitales para Colombia.