Como en los viejos tiempos, provisto de la potencia de sus piernas y apoyado por el fuerte ritmo de subida que imprimió su equipo, Nairo Quintana conquistó, el pasado 15 de febrero, una de las míticas subidas del ciclismo: el Mont Ventoux, triunfo que le permitió quedarse con el título del Tour de la Provence en lo que fue su primer golpe de autoridad con el Arkéa.
En esa jornada, la etapa reina de la competición, el boyacense atacó a 7,2 kilómetros de la meta. Su escalada fue tan rápida que incluso dejó atrás el récord de ascenso que hasta ese momento tenía Marco Pantani, 28 minutos y 20 segundos, logrado en la etapa 15 del Tour de Francia de 1994. Quintana fue 8 segundos más rápido que el italiano, pues llegó a la meta en Chalet Reynard (5 km antes de la cumbre) en 28.12.
“Cuando tienes confianza y las piernas te siguen, inevitablemente hay una buena posibilidad de que el resultado sea bueno”, dijo en su momento el ciclista boyacense.
Y ese antecedente reciente sí que le da confianza la corredor del Arkéa para lo que será su participación, hoy, en el Mont Ventoux Dénivelé Challenge (Desafío al Desnivel Mont Ventux) carrera de un día que cumple su segunda edición y que marca el regreso del escalador colombiano a competencias tras las interrupción de la temporada por la pandemia.
Ya recuperado de una dolencia en la rodilla tras un accidente que sufrió el 3 de julio en Boyacá cuando fue atropellado mientras entrenaba, el líder de la escuadra francesa está preparado para este nuevo desafío en el que estará acompañado de los también colombianos Dayer Quintana y Winner Anacona, además de Diego Rosa, Lukasz Owsian, Alan Riou y Thibault Guernalec.
“Me siento bien al acercarme al Challenge Dénivelé mañana –hoy–, y al Tour de l’Ain en el que también competiré. Estas serán mis dos carreras desde la etapa de La Colmiane en París-Niza. Espero tener buenas condiciones en estos dos eventos que son importantes para el equipo y también para mí”, dijo Nairo a la prensa de su equipo.
Yvon Ledanois, director deportivo Arkéa, se refirió al colombiano y aseguró que en esta prueba evaluarán su rendimiento y del equipo en general tras la suspensión por la emergencia sanitaria.
“Todavía no sabemos dónde está después de varias semanas sin correr y del accidente que sufrió hace unos días. Venimos con ambiciones, pero sabemos que los rivales tienen las mismas intenciones que nosotros. Veremos cómo reaccionan él y sus compañeros”, comentó.
La prueba tendrá un recorrido de 179 kilómetros entre Vaison La Romaine y Mont Ventoux con cuatro premios de montaña. Serán 46.8 km de ascenso con un desnivel de 4.00 metros.
“Esta es una subida que le conviene mucho a Nairo, es un ascenso de resistencia, no es explosivo ni de fuerza, es de saber dosificarse muy bien”, explica el entrenador Luis Fernando Saldarriaga.
El paisaje lunar y los fuertes vientos que envuelven esta cima podrían ser de nuevo el escenario de una victoria de Nairo en víspera de afrontar su principal objetivo, el Tour de Francia.