Conforme avanza el aislamiento preventivo en el país, los canales tecnológicos se vuelven una buena opción para las personas: compras, pagos, transferencias y domicilios, entre otros, son los servicios a los que apelan los colombianos durante esta época.
Y es que, según los datos del Observatorio eCommerce Colombia, de los 12,7 millones de internautas mayores de 15 años en el territorio nacional, el 91 % realiza algún tipo de actividad de comercio electrónico, mientras que el 19 % hace todas sus compras y ventas, exclusivamente, por este canal.
Y así como es alto el porcentaje de quienes utilizan los medios digitales, también lo es el número de tácticas que tienen los amigos de lo ajeno para robar información.
Por ejemplo, el informe Tendencias del Cibercrimen en Colombia 2019-2020, dice que el año pasado se reportaron 28.827 incidentes de ciberseguridad empresarial en el país, y dependiendo de la compañía las pérdidas oscilan entre 120 y 5.000 millones de pesos.
Pero, ¿cómo lo hacen? El Mayor Marlon Toro, director del Centro de Innovación y Ciencia de la Policía Nacional, explica que “infortunadamente, el cibercrimen más reportado en el mundo y en Colombia es el fraude por compra de un producto o servicio que nunca llega” (ver Paréntesis).
Agrega que otra de las técnicas de ataque es el phishing, para pescar información, con la que los cibercriminales, a través de redes sociales o correo electrónico envían formularios, mensajes o noticias falsas diciendo que hay subsidios, oportunidades para ganar dinero, o hasta inconvenientes con los productos financieros para que las personas accedan a una página que les sugieren, en la que les ponen a llenar formularios para ser víctimas de robo de la información y credenciales.