Innovación en reciclaje sin impacto ambiental
“Somos una empresa que nació con la convicción de que podíamos hacer las cosas de manera diferente”, afirma Andrea Alzate, CEO de Altero, en conversación con EL COLOMBIANO.
Y agrega: “Nuestra tecnología no produce vertimientos ni emisiones contaminantes, lo que nos permite transformar las baterías desechadas en materiales reutilizables sin dañar el medio ambiente”.
El desafío del reciclaje en Colombia
A pesar de su rápido crecimiento, Altero enfrenta un reto: la falta de cultura de reciclaje en Colombia. “Aún falta pedagogía para que la gente entienda la importancia de reciclar baterías”, señala Alzate.
No obstante, la empresa trabaja en alianza con planes posconsumo y compañías del sector para garantizar la recolección eficiente de estos residuos.
El país cuenta con regulaciones que buscan fomentar el aprovechamiento de residuos electrónicos. Sin embargo, la difusión de estas iniciativas sigue siendo un desafío.
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“Nosotros estamos alineados con los actores clave de esta cadena para evitar que las baterías terminen en rellenos sanitarios o ríos, causando un impacto ambiental negativo”, explica la CEO de Altero.
El modelo de negocio de Altero ha llamado la atención de inversionistas como K50 Ventures y Auteco Mobility. “Estos fondos de inversión nos han permitido acelerar nuestra operación y consolidar alianzas estratégicas”, afirma Alzate.
La compañía cerró el 2024 con un crecimiento del 69,8% en baterías recicladas respecto al año anterior, alcanzando las 150 toneladas. Sus ventas ascendieron a $1.850 millones, un incremento del 34,5%.
Durante los últimos dos años, la empresa paisa ha exportado más de 200 toneladas de óxidos de cobalto, níquel, litio y manganeso, además de cobre laminar, posicionando a Colombia como una potencia exportadora de estos materiales esenciales para la industria global.
Para 2025, la meta es reciclar 400 toneladas de baterías y generar ingresos superiores a los $4.000 millones. “Estamos preparando una nueva ronda de inversión para expandirnos a otras regiones y llevar nuestra tecnología a nivel internacional”, agrega la directiva.
Un actor clave en la transición energética
El papel de Altero en la transición energética es fundamental. “Si queremos hablar de energías limpias, necesitamos garantizar el reciclaje de baterías”, enfatiza Alzate.
La empresa no solo reduce la dependencia de la extracción minera, sino que también aporta a la economía circular al recuperar minerales críticos para su reutilización.
“Colombia no cuenta con fabricación local de baterías de iones de litio, por lo que nuestros materiales deben ser exportados para su reintegración en la cadena de valor global”, explica la CEO.
El compromiso de Altero con la sostenibilidad se refleja en su meta de evitar la emisión de más de 17.000 toneladas de CO2 en 2025. “Estamos demostrando que es posible combinar impacto ambiental y rentabilidad económica”, concluye Andrea Alzate.
Con su modelo innovador y su visión de largo plazo, Altero se perfila como un referente en la industria del reciclaje y la transición energética en Colombia y la región.
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