El territorio caribeño estadounidense de Puerto Rico, comparado recientemente con una “isla flotante de basura” en un mitin republicano en Nueva York, presentó el miércoles una nueva reserva marina para proteger a los manatíes y otras especies.
El anuncio hecho durante la cumbre sobre biodiversidad COP16 de la ONU, en Cali, se produjo en medio del revuelo causado por las declaraciones de un comediante en un mitin electoral de Donald Trump el domingo.
“Ahora mismo hay literalmente una isla flotante de basura en medio del océano. Creo que se llama Puerto Rico”, dijo el cómico Tony Hinchcliffe.
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“Afortunadamente, esto no podría estar más lejos de la realidad y las comunidades locales del norte de Puerto Rico lo están demostrando”, afirma un comunicado de la ONG Greenhouse Communications, que celebra la creación de una nueva área marina protegida que se extiende a lo largo de 202 kilómetros cuadrados.
La zona, a la que llamarán Jardines Submarinos de Vega Baja y Manatí, abarca arrecifes de coral, manglares y praderas marinas que albergan más de 14 especies amenazadas, entre ellas el manatí del Gran Caribe, asegura un comunicado de la Wildlife Conservation Society (WCS) y otras organizaciones.
“La zona también alberga vibrantes pesquerías a pequeña escala y una industria local de ecoturismo”. Las comunidades esperan que la iniciativa “permita que sus aguas sigan siendo una fuente de alimentos e ingresos para las familias locales durante generaciones”, detalló WCS.
La delimitación del área fue producto de más de 16 años de activismo de las comunidades locales.
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La creación de la reserva ocurre cuando la 16ª Conferencia de las Partes (COP16) del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) entra en su recta final en Cali.
La cumbre, que acaba este viernes, pretende avanzar en la financiación de 23 objetivos acordados en Canadá hace dos años para “detener y revertir” la pérdida de naturaleza.