Karol G abrió su corazón en su nuevo documental Mañana fue muy bonito, donde reveló las duras barreras que enfrentó como mujer en la industria musical.
La cantante paisa relató sobre el episodio de acoso que vivió en sus primeros años de carrera cuando era una adolescente y que estuvo a punto de hacerla renunciar a su sueño.
La cantante confesó que en sus inicios ser mujer fue un “contra grandísimo” para poder avanzar en su proyecto.
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A los 16 años, Karol dejó su hogar en Medellín para mudarse sola a Bogotá para perseguir su sueño de ser cantante. Fue en la capital donde conoció a quien consideraba que sería su futuro manager.
“Era un gran empresario y nos empezó a hablar de un proyecto impresionante que iba a pasar conmigo, de las 50.000 cosas que iba a hacer con mi música. Recuerdo que iba a ser mi cumpleaños y yo estaba en Bogotá, entonces esta persona dice que va a organizar algo en su casa para celebrarlo porque no estaba con mis papás, porque estaba sola”, recordó en su documental.
Karol G reveló que este hombre le confesó que “se había enamorado” de ella y le advirtió que, si no correspondía a sus sentimientos, su carrera musical “no iba a funcionar”.
“Llegué a su casa y luego de conversar un rato, se acerca y me dice que estaba empezando a sentir algo más especial por mí. Yo tenía 16 años y esa persona en ese momento yo estoy segura de que podía tener unos 45-50 años. Como tan incómodo hablar de estas cosas”, dijo la intérprete de “Bichota”.
La situación la afectó tanto que Karol G decidió alejarse de la música. “A mí se me rompió el corazón (...) Toda mi ilusión y mi sueño condicionado. Lastimosamente en las grandes industrias las mujeres tienen que soportar cosas horribles”, agregó.
Karol G considera que “ninguna mujer que se respete va a permitir un maltrato solo para conseguir algo que quiere. Imagínate cuantas mujeres, niñas se pueden sentir identificadas”.
Esa decisión fue un duro golpe para su familia, quien la apoyó desde que era una adolescente para que continuara su camino en la industria, según ha contado la artista paisa en múltiples ocasiones.
Incluso, dijo que “yo nunca me atreví a decirle nada a mis papás. Solamente les dije que no quería seguir en la música. Eso para mi papá fue muy doloroso. Él se sentía decepcionado. Mi papá y yo dejamos de hablar completamente por meses”.
Desilusionada por su experiencia en Bogotá, Karol se fue a vivir con su tía en Nueva York a estudiar inglés y administración. “Cuando me fui a Estados Unidos, tuve un tratamiento como de 8 meses con un psiquiatra. O sea, yo me despertaba y solo quería dormir y llorar”, expresó.
A pesar de este incidente, la artista logró retomar su carrera. “Por más que intente alejarme de la música, la música siempre me trajo de regreso y me dio cuenta que esto es lo que estoy destinada a hacer”.
Karol llamó a su papá y le dijo que quería seguir con su proyecto musical. “Mis papás hicieron esfuerzos económicos impresionantes solamente para sacarme del contrato con el manager que tenía y los dejo endeudados por años”, recordó.
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Hoy, la cantante es dueña de su música y tiene su propia disquera, convirtiéndose en una de las artistas más influyentes del género urbano.
“Por más que uno quisiera explicar cosa por cosa, lo difícil que fue, no me alcanza el tiempo ni creo que sería capaz de hablar de muchas cosas que me gustaría hablar porque nunca como persona me permití recordarlas”, dijo la cantante.
