Por afp y redacción
La Comisión Disciplinaria de la Fifa anunció ayer que el peruano Paolo Guerrero fue suspendido durante un año al dar positivo benzoilecgonina, un metabolito de cocaína, por lo que el delantero del Flamengo se perdería el Mundial de Rusia-2018, al que su seleccionado clasificó después de 36 años (14 de junio al 15 de julio).
“Tras el control de dopaje realizado después del partido de la competición preliminar de la Copa Mundial de la Fifa Rusia, disputado en Buenos Aires el 5 de octubre de 2017, el jugador dio positivo por benzoilecgonina, una sustancia incluida en la lista de prohibiciones de la AMA 2017 en la clase 6 -estimulantes-”, señaló la Fifa en un comunicado.
El periodo de vigencia de la suspensión comienza el 3 de noviembre, fecha en la que el jugador fue apartado de manera provisional por el presidente de la comisión disciplinaria de esa entidad.
El abogado de Guerrero, Pedro Fida, advirtió en Lima: “Vamos a apelar hasta la última instancia, en búsqueda de justicia y en favor del juego limpio y el deporte justo”.
La suspensión del delantero de 33 años incluye todo tipo de partidos en el ámbito nacional e internacional.
Guerrero, capitán de la selección peruana, cumplía con una sanción de 30 días que venció el 3 de diciembre, aunque se había extendido el plazo hasta que el presidente de la Comisión Disciplinaria de la rectora del balompié estudiara la decisión. Luego del juego contra Argentina, que quedó 0-0, su prueba arrojó un resultado analítico adverso.
Perú, que compartirá el grupo B del Mundial con Francia, Dinamarca y Australia, jugó los partidos del repechaje contra Nueva Zelanda sin Guerrero. Ahora acudiría a Rusia sin su máxima estrella .
