El equipo del medio Globo de Brasil captó los disparos, evidenciando la incómoda normalidad de una situación que se ha vuelto cotidiana para quienes trabajan en el club y viven cerca de él.
Tal y como lo evidenció la reacción del propio Coutinho, que se hizo viral en redes sociales. Asimismo, aseguraron que desde el club “proporcionaron todas las condiciones necesarias” para las grabaciones, y señalaron que
El Centro de Entrenamiento, ubicado en las inmediaciones de Ciudad de Dios, en la zona oeste de Río de Janeiro, es un punto neurálgico de la criminalidad que combaten las autoridades diariamente.
¿Cuál fue la razón de los disparos?
Este incidente ocurrió este miércoles, apenas 48 horas después de la muerte del agente José Antônio Lourenço, miembro de la fuerza de élite de la Policía Civil (CORE), durante una operación en la misma región.
El operativo buscaba clausurar una fábrica de hielo sin licencia, sospechosa de distribuir productos contaminados, y desencadenó múltiples tiroteos que paralizaron el transporte público y obligaron a desviar 19 líneas de autobuses de la zona.
Este hecho fue el quinto incidente de violencia que afectó al transporte público en lo que va del mes de mayo en Río. Según declaró un portavoz de Vasco da Gama a los medios, “el club y sus profesionales también son víctimas de la violencia en la ciudad”.
Aunque el centro de entrenamiento fue inaugurado en 2020 con la esperanza de ser una “casa” para el deporte, su ubicación lo expone diariamente a la cruda realidad del crimen organizado. A pesar del constante desafío, el club mantiene su compromiso con la mejora de las instalaciones.
Recientemente, invirtieron en una piscina y sala de hidromasaje para la recuperación de los jugadores, por lo que tienen planes ambiciosos para el futuro, incluyendo un área de nutrición y nuevos espacios para el cuerpo técnico y las directivas.
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