Luego de recibir al menos diez puñaladas en la cara, el cuello y el abdomen, el escritor Salman Rushdie recuperó la capacidad de hablar y de respirar por sí mismo. El atentado ocurrió el viernes 12 de agosto, minutos antes de que el novelista iniciara una conferencia. Los instantes posteriores de temor y angustia fueron registrados por varios internautas que se desplazaron al condado de Chautauqua para escuchar a Rushdie.
La policía capturó al agresor, un libanés identificado con el nombre de Hadi Matar. El presunto agresor fue llevado a la cárcel sin posibilidad de pagar fianza. La fiscalía del Estado de Nueva York lo acusará de intento de asesinato en segundo grado y agresión en segundo grado. De ser condenado, Matar pasará muchos años tras las rejas.
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La orden de muerte contra Rushdie fue emitida a finales de los ochenta por el líder religioso Ruhollah Jomeini al considerar “Los versos satánicos”, de su autoría, un libro profano y hereje. Desde entonces, el autor de origen indio vivió escoltado por la policía británica y estadounidense. Sin embargo, la sombra del fanatismo lo alcanzó la semana anterior y puso en vilo su vida.