Los últimos hechos de violencia que han afectado a la población civil y a las autoridades han provocado una cascada de críticas sobre el liderazgo del ministro de Defensa, Iván Velásquez.
De hecho, desde varios sectores han pedido la renuncia del alto funcionario, uno de los pocos que se ha mantenido en el gabinete tras las crisis ministeriales que ha atravesado el gobierno del presidente Gustavo Petro.
Pues bien, fue el mismo mandatario quien salió a respaldar la labor del ministro de Defensa lanzando un dardo a quienes critican su gestión. “Quieren ministros de defensa que dejen fusilar jóvenes, bombardeen niños y dejen pasar la cocaína. Para estas personas esos si son los buenos ministros”, fue el mensaje de Petro en su cuenta de Twitter.
Pero el presidente no fue el único expresar su apoyo al jefe de la cartera de Defensa. El ministro de Justicia, Néstor Osuna, también publicó un mensaje en su cuenta de Twitter alabando el liderazgo que Velásquez se ha ganado en las Fuerzas Armadas, lo que ha generado, según el MinJusticia, que “pise callos”.
“Soy testigo del reconocimiento que el MinDefensa Iván Velásquez ha conquistado en las Fuerzas Armadas y del que goza ante la ciudadanía. También lo soy de su tesón y su pulcritud. Por supuesto, eso pisa callos. ¡Adelante Ministro, usted es el cambio!”, escribió el jefe de la cartera de Justicia.
Y es que, en los últimos días, el ministro Velásquez ha sido duramente cuestionado por los hechos de violencia que se han registrado en diferentes regiones del país y que, además, están relacionados con acciones adelantas por la guerrilla del ELN, con la que, precisamente, esta misma semana, se acordó el arranque del cese al fuego bilateral.
Y es que esta semana esa guerrilla secuestró en carreteras de Arauca a la sargento Ghislaine Karina Ramírez cuando viajaba en un vehículo particular con sus dos hijos de 6 y 8 años. La suboficial fue liberada junto a sus hijos cuatro días después, el pasado viernes, pero horas antes de ser entregada por integrantes del frente Domingo Laín Sáenz a una delegación de la Defensoría del Pueblo y la Iglesia Católica, el ministro de Defensa lanzó una cuestionada declaración que luego tuvo que salir a rectificar.
En diálogo con medios, el ministro acusó a la uniformada de haber cometido un “acto de imprudencia”, que desencadenó en su secuestro. Luego, en su cuenta de Twitter, explicó que lo que quiso decir fue que la sargento cometió una “ligereza” porque “todos los miembros de la Fuerza Pública debían ser cuidadosos en sus desplazamientos, especialmente en zonas en los que por la situación de seguridad el riesgo se aumenta”.
Pero además de esta retención por parte del ELN, la Policía también fue blanco de varios ataques durante esta semana. Uno de ellos se presentó en Bucaramanga el pasado miércoles, cuando un artefacto explosivo detonó muy cerca de la estación del Norte en Bucaramanga y dejó seis uniformados heridos.
La acción ocurrió en un día convulso en la capital santandereana luego de la muerte de Daniel Ibáñez, un joven motociclista, en un accidente de tránsito. El hecho desencadenó en una asonada en varios sectores de la ciudad.
El viernes se presentó otro hecho de violencia contra la Fuerza Pública en el municipio de Puerto Rico, Meta, luego de que dos hombres lanzaran un artefacto explosivo contra una patrulla que realizaba labores de vigilancia y control en el barrio el Jardín, muy cerca de un polideportivo. El hecho no dejó heridos, pero sí averió la carrocería del vehículo de la policía y afectó varias viviendas.