Desde el inicio de su Gobierno, el presidente Gustavo Petro convirtió sus redes sociales en un canal de comunicación para decisiones trascendentales: como aquella vez que, a las 3:41 de la madrugada, decidió trinar que desautorizaba la entrada de aviones norteamericanos que transportaban colombianos deportados, iniciando así una de las peores crisis del país con Estados Unidos en la historia reciente.
     
  A pesar de que varios de sus trinos han traído consecuencias legales —se ha tenido que retractar en varias ocasiones por orden judicial, por haber dicho cosas incorrectas y sin sustento— y diplomáticas; el mandatario no ha moderado su discurso, interacciones y declaraciones en la red social X. El martes, 28 de octubre, trinó 75 veces.
     De acuerdo con el experto en comunicación política Miguel Jaramillo Luján, la cuenta del presidente Gustavo Petro en X, antes Twitter, supera los 8,3 millones de seguidores, la mayoría radicados en Colombia.
 Según Jaramillo, esta plataforma se ha convertido en el principal canal de comunicación del mandatario, aunque su uso dista de ser bidireccional. “No es un espacio de conversación o diálogo o interacción con una audiencia prosumidora”, explicó, sino “un espacio de lanzamiento de misiles lingüísticos a sus amigos y enemigos”.
 Para el analista, la narrativa digital del presidente responde a lo que denomina “una narrativa del caos”, que busca generar contraste y confrontación antes que institucionalidad.
 En su concepto, ese estilo de comunicación no puede leerse “con una lectura democrática o desde el respeto al Estado”, sino como parte de “una revolución lingüística y del contraste” en la etapa final de su gobierno.
  Su última racha no solo fue una larga lista de declaraciones, sino que, de las 75, 22 fueron atacando a Estados Unidos. Una tendencia que comenzó a las 9:36 a.m.
    Los huracanes “defensores” 
  “Huracanes que defienden el Caribe”, dijo el presidente Gustavo Petro, citando un video en el que se muestra cómo el viento y el agua destruía y atacaba un sector de Jamaica. Para ese momento, el fenómeno natural ya había cobrado la vida de siete personas.
    Actualmente, el huracán ya va más de 10 muertos y se ha alejado de a poco del Mar Caribe colombiano. Varios ciudadanos intentaron hacerle caer en cuenta de la gravedad de la situación, pero el mandatario insistió con que aquel fenómeno natural arrasador era en realidad algo bueno.
    “El sistema de huracanes del Caribe es lo que lleva agua a las islas del Caribe. Sin agua no hay vida. La defensa ante los Huracanes implica disciplina social y pueblos unidos y no divididos, pero sin huracanes no habría vida sino desiertos. Hasta la Guajira tiene agua gracias a las lluvias que traen los huracanes”, dijo Petro en un primer momento.
 A pesar de su insistencia, la pregunta seguía siendo la misma: “¿los huracanes cómo defienden?”.
     A parte del hecho de que sus afirmaciones no eran del todo ciertas —porque la lluvia puede generar ríos, acuíferos y ecosistemas en muchos lugares y no es indispensable para la existencia de selvas ni para que se formen desiertos— resulta importante resaltar que, en su paso por el continente, más de tres millones de personas quedaron sumidas en la zozobra y el miedo, rogando para que los fuertes vientos no destrozaran sus hogares o peor: sus vidas.
 Fue cuestión de horas para que las verdaderas intenciones tras los trinos alabando el huracán fueran confirmadas. A las 11:56 a.m., el presidente reavivó una de las discusiones actuales más fuertes con su homónimo estadounidense, Donald Trump: la de los bombardeos de lanchas en el Caribe por parte de buques provenientes de Estados Unidos.
 Mientras Trump insiste en que son operaciones relacionadas con la seguridad del continente y están enfocadas en atacar organizaciones criminales; Petro asegura que se trata de una violación a la soberanía de varias naciones, y que las políticas antidrogas implementadas por su Gobierno en Colombia han sido suficientes para darle grandes golpes al narcotráfico.
     Sus aseveraciones se dan justo después de recibir la descertificación de Estados Unidos en la materia. Con todos los antecedentes sobre la mesa, el mandatario trinó: “Rompen los tratados internacionales del derecho de gentes. No sé puede hacer uso desproporcionado de la fuerza, las bajas se convierten en asesinatos. Si América Latina y el Caribe no se usan contra la arbitrariedad en el Caribe y las tierras de Bolívar, serán por siempre parias”.
 Siga leyendo: Por orden de un juez, Petro deberá retractarse de haber acusado a Paloma Valencia de ser “cómplice” de falsos positivos
 En menos de dos horas, Petro comparó dos operativos distintos. Uno realizado por Colombia, con métodos convencionales, que dio como resultado la captura de 38 personas y la incautación de 8 toneladas; con el realizado por Estados Unidos, que dejó un saldo de 14 muertos.
 Al respecto, dijo: “Las siete toneladas de cocaína que incautamos en Europa estaban en contenedores de gran barco, y no matamos a nadie. Eso que hace señor Secretario of War (Pete Hegset) es un crimen de guerra”.
 Según el secretario de Seguridad Hegset, los muertos eran “narcoterroristas”, y no pararán las operaciones. Durante el resto del día, el presidente Petro siguió tuiteando al respecto, asegurando que el camino que tomó su Gobierno en torno a la erradicación es el más certero.
 Jaramillo también señaló que la relación con Estados Unidos atraviesa uno de sus peores momentos, y que los mensajes del presidente en redes han contribuido a esa tensión. A su juicio, los trinos recientes “atomizan más la teoría del enemigo común que favorece a Petro”, en especial cuando alude al presidente Donald Trump o reacciona ante sanciones internacionales.
 El experto aseguró, además, que el mandatario dedica varias horas diarias a revisar y escribir personalmente sus publicaciones. “Entre las 9 y las 11 de la mañana, Petro se dedica a revisar con su equipo digital todos los comentarios y empieza a responderlos personalmente”, afirmó, precisando que el presidente podría invertir “de tres a cuatro horas diarias” en esta actividad.
 En su opinión, eso es “totalmente absurdo para un jefe de Estado que debería estar concentrado en construir política pública, visitar territorios o concertar con el Congreso”.
    Detalles de su viaje a Medio Oriente: el “mini vlog” 
  En su viaje a Emiratos Árabes Unidos, Gustavo Petro ha optado por una estrategia poco habitual en él: compartir, casi en tiempo real, cada paso de su agenda internacional.
 Desde su llegada junto a varios ministros y altos funcionarios, el mandatario ha publicado en su cuenta de X fotografías, videos y mensajes sobre los lugares que visita y las personas con las que se reúne.
     Lo que más ha llamado la atención es el tipo de figuras con las que el presidente ha decidido retratarse. Jeques, inversionistas y magnates del mundo árabe aparecen en sus publicaciones, que muestran a un Petro sonriente, abierto a los grandes capitales que antes solía cuestionar.
 El contraste no pasa desapercibido: mientras en Colombia insiste en señalar a los empresarios y “ricos” como responsables de la desigualdad, en Medio Oriente posa orgulloso junto a algunos de los hombres más poderosos del planeta.
     
  Bin Salman, conocido por su papel central en la transformación económica del reino a través del plan Visión 2030, busca reducir la dependencia del petróleo e impulsar sectores como el turismo, la tecnología y la infraestructura.
 Bajo su liderazgo, Arabia Saudita ha invertido miles de millones de dólares en megaproyectos futuristas y en la expansión del Fondo de Inversión Pública, uno de los más grandes del mundo.
 Sin embargo, su figura también ha sido objeto de críticas internacionales por el carácter autoritario de su gobierno y por casos que han afectado la imagen del país, como el asesinato del periodista Jamal Khashoggi en 2018.
     En la agenda de Petro también figuran reuniones con inversionistas de Emiratos Árabes, un país que ha consolidado su papel como centro financiero y tecnológico de Medio Oriente.
 Varios de sus líderes, entre ellos Mohamed bin Zayed Al Nahyan, presidente emiratí y gobernante de Abu Dabi, han impulsado una política exterior basada en la diversificación económica y la inversión global.
 Entérese: ¿Senador o vicepresidente en 2026? Absolución de Uribe abre nueva “encrucijada” en el Centro Democrático
 No obstante, tanto Arabia Saudita como Emiratos mantienen sistemas políticos autoritarios y han sido cuestionados por su historial en derechos humanos, especialmente en el trato a disidentes y en su participación en conflictos regionales como la guerra de Yemen.
    La visita a Medio Oriente también ha tenido otra arista: la de insistir con la agenda política colombiana en Gaza. “Gaza y el Caribe reclaman la mano solidaria de Colombia”, dijo el mandatario, quien también hizo énfasis en que los países que visitó tienen una postura similar a la de él con respecto al conflicto que se desarrolla en el territorio palestino.
 En medio de el “mini vlog” donde cuenta cada uno de sus días en su viaje diplomático, también queda la duda: ¿cómo tiene tanto tiempo para las redes en medio de un viaje con connotaciones políticas y económicas?
 “Cuando un presidente está en el exterior y dedica tiempo a trinar, eso implica que no está aprovechando las agendas con empresarios o el tiempo de trabajo técnico”, advirtió el experto en marketing político en conversación con este diario.
 Según Jaramillo, las comitivas oficiales suelen incluir más familiares y funcionarios cercanos que representantes del sector productivo, lo que, en su opinión, “ha hecho de este uno de los períodos más tristes para la diplomacia y el comercio internacional”.
     De hecho, el mandatario agregó que Gaza “debe ser árabe, pluralista y respetuosa absoluta del derecho de la humanidad” para sobrevivir y resistir.
    No fue solo un día 
  Además de los temas mencionados, en solo una tarde Petro habló sobre EPS, sobre reforma a la salud, sobre política y cultivos ilícitos. Pero no es una tendencia nueva, o poco recurrente.
 El fin de semana, el presidente Gustavo Petro también aprovechó para publicar varios trinos que resultaron polémicos. Durante y después de la jornada de votación para decidir los candidatos que tendrá el Pacto Histórico en 2026, el mandatario publicó:
     ”Bailo la bella Ciao, que el pueblo baile cumbias y porros y bundes, y guabinas y que suenen los tambores negros de la libertad, bailes y danzas por la libertad. En todos los pueblos de Colombia. Hagamos fiesta popular, Hay un bailarín del nuevo día y se llama Simón”.
 Además, puso varios mensajes hablando acerca de estar enamorado de Colombia, sobre invitar a bailar a los pueblos de Colombia y sobre la energía vital del mundo. Tampoco desaprovechó la oportunidad para volver a mencionar la posibilidad de una constituyente.
     Y así, aquella foto en la que posó con sus mandamientos en donde aseguraba que no haría una reforma a la Constitución Política, poco a poco queda más en el olvido.
 Ahora, con su viaje a Medio Oriente, también posa con grandes empresarios del sector petrolero, orgulloso de darles la mano y compartir, mientras que en Colombia insiste en darle la espalda a aquel recurso.
    La confrontación como estrategia de marketing 
  El hecho de que el presidente Petro tenga una gestión directa de sus redes, explica Jaramillo, explicaría la gran variabilidad en la frecuencia de sus publicaciones y los errores recurrentes en la redacción o el uso de imágenes.
 Según el experto, “no existe una parrilla de contenido”, y por eso “el volumen depende de lo que el presidente vaya encontrando”, lo que refuerza la percepción de un manejo “personal y espontáneo”.
 Para Jaramillo, más que dialogar, Petro emite mensajes en clave ofensiva y reactiva, donde predomina la confrontación. “No veo un presidente dialogante ni conversante, ni prosumidor”, afirmó.
 En su criterio, el mandatario “responde insultos, insulta, ataca” y con frecuencia comparte información sin verificar, lo que ha derivado en la difusión de noticias falsas o contenidos manipulados.
 El experto también considera que este estilo de comunicación busca mantener movilizado a su electorado más fiel. “El presidente sigue apelando a ese sector que no está gobernando Colombia, sino comunicándose con una parcial que lo sigue como figura presidencial, como caudillo”, señaló.
 En ese sentido, explicó que Petro recurre a una retórica de “emancipación y revolución”, dirigida a su base política más cercana.
 Finalmente, el experto recordó que X, desde la gestión de Elon Musk, “está más diseñada para la confrontación” y ha perdido su carácter de red endógena.
 “Hoy está más llena de delincuencia, de pornografía y de violencia que nunca”, explicó, por lo que considera necesario entender la comunicación del presidente también “desde la realidad algorítmica que vive la plataforma”, una red que amplifica la exposición y el impacto de cuentas con millones de seguidores, como la de Petro.