Son 20 familias entre norteamericanas, italianas y canadienses las que estaban adelantando trámites de adopción de niños, niñas y adolescentes de difícil adoptabilidad antes de que iniciara la cuarentena, pero con la suspensión de términos judiciales decretada por el Consejo Superior de la Judicatura (CSJ), los procesos quedaron paralizados y los menores se sienten de nuevo abandonados.
Desde la Fundación Casa de María y el Niño, donde viven los menores de edad que buscan un hogar, explicaron que los trámites más urgentes son los de familias extranjeras que adoptarán a niños mayores de 8 años, grupos de más de tres hermanos o de aquellos niños que tienen alguna enfermedad crónica o discapacidad. Estos no encajan en el estereotipo que desean los padres adoptantes, ya que en su mayoría prefieren a menores de cinco años completamente sanos.
Pero estas 20 familias foráneas llegaron a Colombia a terminar el trámite que les había sido aceptado con anterioridad, con la ilusión de volver a su país de origen con su nueva familia, pero con la cuarentena, el cierre de fronteras y la suspensión de términos judiciales, todo quedó en vilo.
Sin embargo, al menos tres familias retornaron en vuelos humanitarios y uno de los menores ya había vivido un mes con ellos, por lo que se siente doblemente abandonada. Desde la Fundación también detallaron el caso de una joven de 17 años, que si cumple los 18 ya no podrá ser adoptada.
Por eso la procuradora delegada para los Derechos de la Infancia y la Adolescencia, Adriana Herrera Beltrán, le solicitó al CSJ, que incluyera en las excepciones de la suspensión de términos los referentes a los trámites de adopción en algunos juzgados de familia; sin embargo, la rama judicial no ha dado respuesta oficial a la petición.
Así mismo, Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) instauró una tutela contra del CSJ, la Cancillería y la Registraduría por la vulneración de los derechos de la infancia, misma que deberá resolver el Tribunal Superior de Cundinamarca durante la próxima semana.