La empalizada por las fuertes lluvias del fin de semana que obstruyó el río Murindó, única vía de comunicación de sus habitantes con el resto del departamento, cobró la vida de una recién nacida que se quedó esperando una solución para salir del municipio a recibir atención.
El hecho lo dio a conocer el personero del municipio, Dolcey Torres Segura, quien narró que la bebé había nacido en la madrugada del martes en la comunidad indigena Guagua. Según el testimonio de Torres, fue una docente la que lo alertó sobre la situación y le manifestó que la neonata tenía problemas respiratorios y una inflamación en su cabeza. La niña tuvo dos crisis en un lapso de tres horas.
El personero activó la ruta de atención y puso en conocimiento el hospital que se preparó para recibir a la bebé. Sin embargo, debido a la empalizada que bloquea el río, la única opción era transportarla hasta el casco urbano por vía aérea para lo cual se puso en comunicación con la Gobernación de Antioquia, pero asegura que no recibió respuesta.