Medellín: un paso para transformar la educación

El propósito de la Secretaría de Educación es potenciar los espacios de aprendizaje y adaptar los currículos en los colegios.

En 82 instituciones se adoptaron transformaciones curriculares con miras a fortalecer procesos pedagógicos. FOTO Camilo suárez

Carlos López

16 de julio de 2021

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Con la presencia de la ministra de Educación, María Victoria Angulo, la Alcaldía de Medellín hizo ayer, desde la Institución Educativa José Acevedo y Gómez, dos anuncios para ese sector.

El primero tiene que ver con la transformación curricular en la ciudad y el lanzamiento oficial de la campaña “Prende el Chip, Aprende en Medellín”, con la que se “quiere seguir siendo una ciudad del aprendizaje”, le contó a EL COLOMBAINO Alexandra Agudelo, secretaria de Educación de Medellín.

La estrategia busca fortalecer y ofrecerle a la población más lugares para adquirir conocimientos y saberes. De hecho, Agudelo dijo que son 1.400 espacios disponibles en la ciudad para el aprendizaje, incluyendo bibliotecas, colegios y parques.

El anuncio va enmarcado dentro de una segunda línea de transformación educativa propuesta en el Plan de Desarrollo 2020-2023. Dentro de esa línea se ha venido trabajando desde el año pasado con 82 planteles educativos precisamente en una transformación curricular.

Según Angulo, la idea es que el aprendizaje “se dé desde el interior de las instituciones hacia la ciudad, al contrario de otras experiencias pasadas y también positivas”. Añadió que llevan “un 35 % de cobertura, se quiere un 50 % este año, y en 2023 el 100 %”. Así las cosas, el plan cobijaría a los 229 planteles oficiales de Medellín.

Para explicar ese cambio curricular desde los salones, este diario habló con Eduardo López, rector de la Institución Educativa Pablo Neruda.

“En marzo de 2020 nos llegó esa transformación. Es un conjunto de cambios encaminados a modificar los procesos curriculares y pedagógicos de las instituciones, para así lograr pertinencia, es decir, que el saber sea para todos”.

Su institución es una de las 82 escogidas por la Secretaría para empezar la transformación, y en ella ya no se habla de asignaturas, sino de componentes.

Por otra parte, la visita de la ministra tuvo que ver con el regreso a la presencialidad escolar del 99 % de instituciones, y de 310.000 estudiantes. “Los que no han vuelto ha sido por temas de infraestructura educativa, de hacer adecuaciones”, resaltó la secretaria Agudelo.

La adaptación

“Pasamos de 12 asignaturas a cuatro componentes”, dijo el rector López. Según él, al principio adaptarse a las cartillas por parte de los estudiantes fue un poco difícil, pero desde un tiempo para acá todo ha salido bien. En su colegio en los horarios ya no se habla de materias, sino de componentes: el biológico, social, lógico-creativo y el de lenguaje. Dentro de ellos se ven distintas áreas como química, matemáticas y filosofía.

De todas formas, resaltó que este cambio va encaminado a que los estudiantes “aprendan a convivir con el otro, comunicarse y reconocer a las personas. Eso llevará a la eficiencia curricular”.

El rector afirmó que este paso hacia nuevas estrategias viene dándose desde hace años, pero ahora último se ha incrementado. Para el cambio curricular en su colegio, dijo que un equipo de la Alcaldía fue, “observó, concertó, aplicó un instrumento y entre todos empezamos a construir”.

Según la Secretaría, “cada práctica pedagógica innovadora tiene en cuenta el contexto de cada establecimiento”. Por eso, lo que se trabaje en el Pablo Neruda puede ser distinto a lo que se en otro centro.

De acuerdo a palabras de la secretaria Agudelo, en todo este proceso no se “quiere llegar a cada institución como los que sabemos, sino ser mediadores”. De esta forma planea cumplir el objetivo trazado de educar a través del ejemplo y lo aplicable

35 %

de las instituciones de la ciudad han aplicado la transformación curricular.