El desabastecimiento de varios medicamentos a nivel nacional está golpeando fuertemente al Hospital Mental de Antioquia.
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La institución alertó tener por lo menos 13 medicamentos agotados o en riesgo de agotarse en cuestión de meses por cuenta de esa contingencia.
“Estamos atravesando un desabastecimiento de medicamentos a nivel nacional, situación que escapa a nuestro control como institución debido a las repercusiones que puede tener en la salud mental de nuestros pacientes”, expresó la institución en un comunicado, sosteniendo que la falta de suministro desde varias farmacéuticas es lo que ha generado la situación.
La entidad publicó un listado precisando cuáles son los medicamentos de los que ya no se dispone de existencias o están próximos a terminarse.
Dentro de los fármacos que ya se agotaron (con corte a octubre), se discontinuaron o no están disponibles en el mercado la institución señaló que están la Duloxetina, Paroxetina, Trazodona, Pregabalina (de 25 y 150 miligramos), Risperidona, Venlafaxina, Olanzapina, Divalproato, Clobazam, Lamotrigina y Quetiapina.
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El hospital advirtió que para este mes de octubre se agotaron sus existencias de Escitalopram (de 10 y 20 miligramos), en el mes de noviembre se quedaría sin Pregabalina de 75 miligramos.
Por cuenta de esta situación, la entidad pidió a los pacientes y sus familias tener paciencia mientras se estabiliza la situación.
Durante los últimos meses, el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima) ha venido alertado de la falta de existencias de varios medicamentos, en una problemática atribuida a problemas en la fabricación y en otros casos incrementos en las demandas.
Además de los medicamentos psiquiátricos, en el mercado también escasean anestésicos y otros fármacos empleados en tratamientos para la epilepsia, afecciones respiratorias, diabetes, entre otros.
Otros hospitales con problemas
En semanas recientes, otras dos entidades que se han visto golpeadas por la falta de insumos en Medellín por otros factores han sido el Hospital Alma Máter y Metrosalud.
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En el caso de Alma Máter, la Clínica León XIII, su sede más grande y uno de los centros de atención más importantes de la ciudad, tuvo que activar un plan de contingencia luego de que el contratista que se encarga del servicio farmacéutico terminara de forma unilateral su contrato.
A comienzos de este mes, esa situación generó que el hospital se viera obligado a cerrar temporalmente 200 camas mientras estabilizaba sus inventarios y avanzaba en su proceso de reabastecimiento.
También por otros factores, a finales de septiembre pasado, Metrosalud tuvo problemas en sus inventarios de insumos como cintas de micropore, jeringas, tubos para la toma de muestras y anestésicos, en una situación atribuida a los problemas financieros que arrastra durante los últimos años y también la escasez en el mercado nacional.
“En la red encontramos servicios de urgencias que están desabastecidos de tubos endotraqueales, guías para intubación, entre otros. Se ha normalizado tener pacientes con largas estancias en el servicio de hospitalización a quienes es necesario cambiar la terapia antibiótica porque no tenemos cantidades suficientes para garantizar tratamientos completos, aumentando el riesgo de resistencia bacteriana y generando lo que puede ser en el corto o mediano plazo un problema de salud pública para el distrito”, alertaron durante ese mes los sindicatos Asmedas y Asmetrosalud.
La situación más crítica se atravesaba en las unidades hospitalarias de Castilla, San Cristóbal, Nuevo Occidente, Belén, Santa Cruz y Manrique.
“La situación en este semestre la hemos venido subsanando y superando. No en vano mantenemos prácticamente 300 pacientes hospitalizados diariamente y en los servicios de urgencias deben de estar entre 120 y 130 personas”, expresó el gerente de Metrosalud, Juan David Arteaga Flórez, señalando que a comienzos de este mes se inyectarían por lo menos $5.000 millones para estabilizar nuevamente la situación.
En el caso de Metrosalud, los principales medicamentos agotados por el desabastecimiento nacional eran diclofenaco, propofol y remifentanilo.
