Cuando pruebe alguno de estos platos tal vez no sea capaz de nombrar sus sabores. La mayoría de ellos son tan distintos a los que ofrece nuestra gastronomía que degustarlos es, de verdad, una nueva experiencia culinaria.
Recetas asiáticas, europeas, americanas, todas con una “personalidad” distintiva entre la variedad de cocinas que hay en la ciudad.
Para Lorenzo, que es crítico gastronómico de EL COLOMBIANO, cabe anotar que en los lugares donde se preparan los platos que él recomienda –Pollo Inca, Lemoncillo, El Alemán Pues, Podestá– “hay personas oriundas de cada país, lo que para mí garantiza una proximidad más exacta al sabor original” .
Por su parte, Julián Posada, que no es crítico, pero sí un apasionado de la gastronomía, y de otros temas, como el arte y la moda, resalta “la materia prima” que usan los lugares, logrando que el plato sea más auténtico en la medida que los chefs sean fieles a ellos. Posada señala que en Colombia “hay que desarrollar un mayor respeto por los ingredientes”, de esa manera cada plato se sentirá más original.
1. Italia más allá de la pasta
Italia, tan reconocida por sus pizzas, tiene dos platos que pueden probarse en Medellín para sentir que está en Milán o en Roma: lasagna y ossobucco, para el que se debe usar en la preparación un buen vino y una carne de calidad . El primero en Il Castello Ristorante y el segundo en Podestá, donde lo sirven con fetuccine en salsa Alfredo.
2. Sea un mero mero comensal
En Medellín sí que hay opciones de comida con influencia mexicana, sobre todo la tex-mex, pero a los más puristas les gusta la que no viene desde Texas, entre ellas, los chilaquiles que se hacen con totopos y se comen al desayuno o como brunch, acá a cualquier hora y los recomiendan en el restaurante del mismo nombre: Chilaquiles.
3. Como un taco, pero oriental
Baos, un plato que en Medellín hace 10 años seguro sonaba extraño, ahora es más común entre la oferta gastronómica que hay en la ciudad. Su nombre original es baozi y se trata de un pan cocido al vapor al que le ponen rellenos de vegetales y carnes. En la ciudad tienen prestigio los de Bao Bei, cocina asiática contemporánea.
4. Una variedad que vale la pena
Lo primero que se imaginan los comensales entre la oferta culinaria alemana son las salchichas, y sí... Este alimento seduce más de un paladar por el embutido con el que se prepara, que puede incluir varios tipos de carne y especias, además de tener diferentes texturas. En Medellín hay un alemán muy paisa, El Alemán Pues, allá se comen.
5. Degustar el sudeste asiático
De la comida tailandesa es bastante conocido el pad thai. La receta incluye, entre otros ingredientes, fideos de arroz y gambas; además de tener una que otra clave en su preparación: que los langostinos le den el color anaranjado al arroz. Desde la cocina de Royal Thai se prepara este representante de Tailandia y otros platos de ese país.
6. Un cordero con sabor indio
Una de las recetas tradicionales indias es un tipo de curry, el cordero Rogan Josh, hecho con trozos de pierna de cordero marinados en yogur con especias, ese sabor de la India se puede conocer en el restaurante Naan, donde además de ese plato se puede probar otra clase de curry, cordero madrás o inclsuo el pollo tikka masala.
7. Para saborear el mediterráneo
La gastronomía española tiene sus referentes entre los comensales: patatas bravas, tapas, pulpo a la gallega y paella, este último, tan reconocido, que la versión valenciana espera convertirse en patrimonio de la humanidad. En Medellín puede comerla en El Payés o en San Miguel Cocina Casual, El Barral Tapas & Paellas y Olé restaurante.
8. Ir hasta la Alta Saboya, en Francia
De la oferta de platos franceses es común que la gente haya oído hablar, o probado, el foie gras, la cassoulet o el confit de pato. También hay un plato, la Tartiflette, descrito por el restaurante Voilà Vinos como una receta a base de papas salteadas, cebolla, tocino ahumado y vino blanco, gratinada con queso francés; allá la preparan en momentos especiales.
9. Probar comida con carácter
Las costillas de cerdo se preparan en diferentes países, pero hay uno con una receta especial: Vietnam. Las que se hacen allí son caramelizadas y se conocen como suon ram mãm; también se caracterizan ser por tiernas y jugosas, estofadas a fuego lento en leche de coco. En el restaurante Lemoncillo las sirven con arroz y vegetales.
10. Como estar en una pollería
La gastronomía peruana se destaca en Latinoamérica, sus sabores son particulares y a quienes los conocen de primera mano se les hace difícil encontrarlos fuera del Perú. Hay uno, el del pollo peruano, que debe ser jugoso, contundente y en las brasas hasta el punto justo. En Pollo Inca, en Guadalcanal, lo sirven con papas, también muy peruanas.
11. Probar Argentina en un asado
Argentina es famosa por su asado, choripanes y alfajores. Conocer los cortes y prepararlos con minucia es necesario para llegar al auténtico sabor del sur del continente. Ese característico asado es el de Estación Caballito, un lugar en el que no solo se siente Argentina en sus platos, sino también en los tangos que suenan, a veces en vivo.
12. Sentir el alma de la cocina japonesa
Las opciones de lugares para comer sushi en la ciudad son variadas y en ellas se consiguen el tradicional uramaki y otros como el niguiri, el sashimi y el temaki, que son unos tipos de konos en los que se enrolla el relleno con las manos, esos se consiguen en Hanami Teppanyaki Sushi Bar, donde dicen tener el verdadero espíritu japonés.