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A Mario Puchulú le gustaba la pizza con vino. Una vez, en una de las tantas visitas que hizo a EL COLOMBIANO lo contó durante una entrevista. Ese día, como enólogo asesor del Grupo Éxito, estaba hablando de Maridaje, un evento en el que se le veía hablando, por supuesto, de vinos. Ese era su tema, fue un experto de los que pocos existen en el país.
Mario murió este martes en Medellín, confirmaron amigos cercanos. Se destacó como enólogo en la ciudad y en Colombia; fue “el hombre que puso a la ciudad a tomar vino”, coinciden en eso Luis Fernando Valencia, director de eventos especiales de Dislicores, y Lorenzo Villegas, crítico gastronómico de EL COLOMBIANO.
Puchulú nació en Rivadavia (Mendoza, Argentina) y pasó sus primeros años en un viñedo, su padre se dedicaba al vino. Estudió una licenciatura en enología en la Universidad Juan Agustín Maza (Ujam) en esa provincia y antes de eso había sido subteniente de reserva del ejercito de ese país.
Llegó a Colombia en 1999, recuerda Villegas. Sabe bien el dato porque, según él, lo recibieron con un hecho trágico, la bomba de la Torre Argos, en la Avenida Oriental. Puchulú estaba cerca, andaba hospedado en el Gran Hotel, a menos de dos cuadras.
“Cuando llegué a Colombia, una viaje bastante largo en esa época. Esa noche hicieron un atentado, me recibieron con bomba y todo”, relata Puchulú en un video del programa Mi primera vez que compartió Villegas.
Mario vino a ser el director de producción de Provica, una empresa en San Pedro de los Milagros (Antioquia), cuenta Luis Fernando Valencia, quien llama al argentino, su maestro, pues hace 15 años le enseñó sobre vinos. Adicionalmente, Valencia expresa que Puchulú fue enólogo asesor de Dislicores.
Ese trabajo que comenzó a hacer el argentino en la ciudad fue reconocido por el Grupo Éxito, que lo convocó para hacer parte de la organización de Expovinos, un evento que tuvo su primera edición en Medellín antes de que lo terminarán organizando definitivamente en Bogotá.
De esa manera también inició una tarea de difusión y enseñanza de la cultura del vino en Medellín y en las principales ciudades del país. “Creo que es gracias a él que en Colombia, sin desconocer dos personajes más, se empezó a tomar más vino y, además, a capacitar gente en ese tema”, recuerda Lorenzo Villegas. Valencia añade: “Los del mundo del vino le debemos mucho, trajo esta cultura a nuestra región”.
A Puchulú siempre le llamó la atención el buen trato que le dieron en la ciudad. Acá, además de conseguir a su esposa, Mario, según cuenta el crítico gastronómico, “se enamoró del chicharrón. También tomaba ron y lo pasaba con un pedacito de bocadillo, una combinación inesperada para alguien tan conocedor del maridaje”, resalta Villegas, quien añade que el argentino fue un abanderado del maridaje con la cocina colombiana. Pero Puchulú, como cuenta en el video del programa Mi primera vez. “Podría vivir a punta de ibérico (jamón), aceituna, Jerez y pan tostado”.
“Definitivamente, un enólogo con un gran conocimiento, una persona muy respetada en el sector gastronómico”, concluye Valencia.
“Puchu era muy buen conversador, te hacía reír. En cualquier momento de la conversación te preguntaba de dónde eras vos y decía: ‘¿en tu casa había arañas?’. Fue un ser humano ejemplo de rectitud y honestidad”, expresa Villegas.