La árbitra, la portera y la jueza de línea
Imagínense que el español es un círculo grande, de color rojo. Todo lo que está dentro de ese círculo son las palabras que usamos. Algunas de ellas y algunas estructuras que formamos con ellas son “incorrectas-coloquiales”, según las academias, como “pasiar” en vez de “pasear” o “la calor” por “el calor”. Incluso “hubieron muchos niños” en vez de “hubo muchos niños”.
“Amixs” o “niñ@s”, en vez de “amigos” o “niños y niñas”, se salen de ese círculo rojo, se salen del idioma. Así que su problema no es que sean correctas o no (lo hoy incorrecto mañana podrá ser correcto, no es difícil que ocurra). Su problema es que están por fuera del idioma, entre otras cosas porque no podemos pronunciarlas (¿cómo suena “amixs”?).
En cambio, la árbitra, la árbitro, la juez, la jueza, la portera, “niños y niñas”, en fin y en fin, están dentro de ese círculo rojo y son fruto de la evolución natural y divina del español. Y esta evolución tiene que ver con lo que ocurre en la calle, con la realidad: cuando no había fútbol femenino, un narrador decía el árbitro y el portero, no pasaba nada. Pero el América de Cali acaba de salir subcampeón de la Copa Libertadores Femenina, siguiendo la costumbre del mítico América masculino (chiste, malo por demás, que los futboleros me entenderán), y los narradores, después de décadas hablando de hombres, tuvieron que aprender, gagueando, a decir árbitra, portera, jueza... Un narrador le sugirió a su comentarista que dijeran “la guardameta” que porque “portera” suena feo. Bueno: la fealdad es subjetiva, la gramática es colectiva (el círculo rojo). Así que todos estos femeninos funcionan perfectamente.
Preguntan los lectores
Héctor Madrigal. ¿Vamos o vayamos?
Apreciado Juan David: últimamente en las presentaciones del presidente en TV y en algunas del alcalde veo que utilizan la palabra “vayamos” en lugar de “vamos”. ¿Es correcto? A mí me suena mejor “vamos”. Muchas gracias.
Héctor, pues depende del caso. “Vamos” es lo que las gramáticas llaman presente de indicativo. “Nosotros vamos muy bien en la escuela”. “Vamos a comer a tu casa hoy”. “Vayamos” está en modo subjuntivo (no en indicativo), que es el que usamos cuando tenemos duda, mientras que con el indicativo expresamos seguridad, la seguridad de que “vamos a comer”, sin dudas, sin miedo, sin pedir permiso... “Ojalá sí vayamos mañana” (como que de pronto no vamos, como que de pronto sí). Ten en cuenta que el uso manda y que esto no está metido en una urna de cristal.
¿Una redundancia?
Omar A. Ocampo L.
En tu columna escribiste: “... no me contagié yo, pero sí mis seres queridos”, que da igual decir “yo no me contagié”, pero el pronombre “yo” sobra. Debería decirse “no me contagié”. O será, como lo has dicho, que se escribe así para darle énfasis.
Ómar, eso es, un énfasis mío, intencional, rítmico. Recuerda que en español tenemos sujeto expreso y sujeto tácito. “Yo me llamo Juan” tiene sujeto expreso, mientras “Me llamo Juan” tiene sujeto tácito (el mismo pronombre “yo”). No alcanza a ser un pleonasmo, digo yo. Es una de tantas flexibilidades de un idioma muy bien hecho.