Nosotros somos cautelosos ante los recientes anuncios del Gobierno de que se han reducido las posibilidades de un racionamiento. Se trata del fenómeno de El Niño más intenso en la historia del país. No cantemos victoria. Nos faltan los peores meses y ahora, en la época de lluvia, los embalses apenas subieron del 62% al 65%. Falta la época de sequia, que será el primer semestre del próximo año. La prioridad de ahorrar sigue siendo vigente y para todos los colombianos.
Seguimos insistiendo en que el sistema eléctrico colombiano es confiable. Es un sector súper robusto. Más allá de los problemas financieros que tienen algunas generadoras térmicas, todas las otras plantas están generando sin excepción. Por tres empresas que han tenido problemas financieros no se puede decir que el sistema no aguantó.
Colombia no se ha apagado. Se apagaron Ecuador, Venezuela y otros vecinos, pero nuestro país sigue funcionando.
El Gobierno ha tomado buenas medidas. Las acciones del Ministerio de Minas y Energía son necesarias para garantizar una generación de energía eléctrica con combustibles líquidos de manera continua y que atienda la demanda. Esto nos deberá llevar a que no tengamos un apagón y ojalá tampoco un racionamiento.
