En el corazón de la discusión sobre la reforma laboral que esta semana entra a tercer debate en el Senado, está el futuro de miles de aprendices del Sena.
Dos ponencias —la mayoritaria impulsada por la Comisión Cuarta del Senado en cabeza de la senadora Angélica Lozano, del partido Verde; y la alternativa presentada por el Pacto Histórico, a cargo de la senadora Aida Avella— ofrecen miradas radicalmente distintas sobre qué debe ser un contrato de aprendizaje y cómo debería funcionar.
Lea más: Así sería el nuevo auxilio de conectividad que reemplazaría al de transporte para algunos trabajadores
La ponencia definitiva, que es respaldada por una mayoría multipartidista, plantea mantener el carácter formativo del contrato de aprendizaje, con una estructura clara de apoyo económico según el tipo de formación.
En cambio, la alternativa, liderada por el gobierno Petro, propone convertir este contrato en una relación laboral especial, regida por el Código Sustantivo del Trabajo.
Así quedaría el apoyo económico para los aprendices
Ponencia definitiva (mayoritaria):
- Formación dual: el aprendiz recibe el 75 % del salario mínimo el primer año y el 100 % el segundo año.
- Formación tradicional: 75 % en etapa lectiva y 100 % en etapa práctica.
- Estudiantes universitarios: mínimo un salario mínimo, sin importar el modelo.
Ponencia alternativa (Pacto Histórico):
- Etapa lectiva: 60 % del salario mínimo.
- Etapa práctica: 100 % del salario mínimo.
- Se aceptan condiciones más favorables si así lo establecen convenciones colectivas o fallos arbitrales.
¿Es o no un contrato laboral?
En este punto está el meollo del asunto. La ponencia mayoritaria defiende la naturaleza especial del contrato, sin carácter laboral pleno, ni prestaciones sociales como las de cualquier empleado.
En ese caso, el texto precisa que la subordinación del aprendiz está limitada exclusivamente al proceso formativo y, aunque se reconoce la afiliación a salud, pensión y riesgos laborales, no hay vínculo laboral como tal.
Entérese: Reforma laboral: dos ponencias y varios ajustes que cambiarían la forma de trabajar en Colombia
Por el contrario, la propuesta alternativa del Pacto Histórico establece que el contrato de aprendizaje es un contrato laboral especial y a término fijo, lo que lo haría sujeto a todo el régimen laboral colombiano.
Esta propuesta incluye afiliación completa al Sistema de Seguridad Social desde el inicio y convierte el tiempo como aprendiz en experiencia laboral válida para efectos de primer empleo.
Monetización: cuánto pagan las empresas si no vinculan aprendices
- Ponencia definitiva: la empresa que no contrate un aprendiz debe pagar al Sena 1,5 salarios mínimos por cada cupo incumplido.
- Ponencia alternativa: ese valor sube a 2 salarios mínimos, con el argumento de desincentivar la monetización y forzar a las empresas a contratar aprendices.
Sobre el uso de estos fondos, ambas versiones coinciden en que un porcentaje debe destinarse a ampliar la cobertura educativa del Sena, especialmente en zonas rurales.
La ponencia alternativa, sin embargo, va más allá: propone usar el 50 % de estos recursos para apoyar económicamente a los aprendices más vulnerables, con subsidios de hasta un salario mínimo para prevenir la deserción.
Medicina e inclusión: nuevos beneficios
Ambas ponencias coinciden en que los internos de medicina que hagan el año de internado obligatorio deberán recibir al menos un salario mínimo mensual, y estarán afiliados al sistema de seguridad social.
La propuesta alternativa incluye más: un enfoque territorial para aumentar la cobertura del Sena en zonas vulnerables y un artículo nuevo que promueve las prácticas laborales en el sector público, contadas como experiencia profesional válida.