Analistas del sector advierten que sin importar las diferencias por la conformación de la junta, se debe mantener el gobierno corporativo.
Un nuevo pulso entre el presidente electo Gustavo Petro y el mandatario saliente Iván Duque se viene dando en los últimos dos días, y la disputa es por quién logrará quedarse con la batuta de Ecopetrol.
El contrapunteo comenzó en marzo pasado cuando en la Asamblea de Accionistas se aprobó una propuesta para aumentar de dos a cuatro años el periodo de la actual junta directiva, en un movimiento calificado por los analistas como una forma de “amarrar” a los miembros de ese órgano hasta 2025.
Pero más allá del hecho de ampliar por otros 24 meses el periodo de los actuales miembros del directorio, llamó la atención que siete de los nueve nombres que la componen fueron designados en su momento por el propio presidente Duque.
Los ánimos se caldearon, cuando el mandatario electo Gustavo Petro reaccionó a una publicación del diario La República acerca de los pesos y contrapesos que hay en la administración de la petrolera, con los que se busca mantener el gobierno corporativo.
“No nos reten. El voto popular es mandato. Quiero producir un consenso, pero no doblegar el voto popular que quiere energías limpias. El propietario público elige libremente sus miembros en las empresas que lo representen. Es la representación del pueblo”, resaltó el futuro jefe de Estado a través de su cuenta de Twitter.
Horas después, el presidente Iván Duque en varias emisoras radiales salió al paso y advirtió que no quiere generar discrepancias con el presidente electo.
Así mismo, reiteró que la junta directiva de la petrolera en sus decisiones, en las que también se incluyen los periodos de administración, se derivan del gobierno corporativo, por lo que subrayó que no se busca “atornillar” a algún miembro en algún cargo.
Gobierno corporativo fuerte
Al consultar con analistas del sector petrolero, sobre los posibles efectos en el gobierno corporativo de Ecopetrol por el pulso entre el jefe de Estado saliente con el electo por la conformación de la junta directiva, explicaron que lo fundamental es que la petrolera lo logre mantener..
“Su gobierno corporativo debe ser fuerte, que responda a una estrategia de mediano y largo plazo, y no coyuntural y de corto plazo, y sobre todo que se respete el avance que ya logró el país de que ningún ministro del gabinete esté en el órgano directivo para garantizar la transparencia e independencia entre la función regulatoria y de control del estado versus la empresa”, afirmó el analista Julio César Vera, presidente de la Fundación Xua Energy.
La fuente consultada recalcó que era de esperarse que el nuevo Presidente quiera nombrar la junta Directiva de Ecopetrol, “pero lo fundamental es que el gobierno corporativo se fortalezca y no se debilite con los cambios o con movimientos inadecuados que afecten la confianza del mercado, y que pueden generar efectos muy importantes sobre el valor de la acción y su valor como empresa”.
En el pulso entre Gustavo Petro e Iván Duque, entró a terciar el sindicato de la USO al afirmar en su cuenta de Twitter que el Ejecutivo blindó la actual junta directiva para hacerle contrapeso a la designación de un nuevo presidente de Ecopetrol, nombramiento que hará el próximo mandatario Gustavo Petro.
Por su parte, José Antonio Ocampo, ministro designado de Hacienda, afirmó que una vez entre el nuevo gobierno, programarán una asamblea extraordinaria de accionistas de la petrolera para reformar los estatutos como primer paso para elegir los nuevos miembros de la junta directiva
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