La decisión final sobre la liquidación de Friogán se definirá hoy, cuando se espera el pronunciamiento de la Superintendencia de Sociedades acerca de si se acepta el plazo para rescatar la empresa con frigoríficos en el país o si se liquida. Su concepto será acatado por el Ministerio de Agricultura.
Esta situación ha enfrentado en días recientes al ministro Aurelio Iragorri, y al presidente de Fedegán (gremio ganadero), José Félix Lafaurie, pues el Fondo Nacional del Ganado (FNG) tiene el 78 % de Friogán y su administración le fue quitada a Fedegán desde enero pasado.
La deuda actual de Friogán asciende a 71.500 millones de pesos y el Ministerio ha cuestionado los que considera malos manejos financieros.
Por eso no ha firmado un acuerdo de reorganización empresarial que le daría viabilidad financiera a Friogán, lo que la deja ad portas de la liquidación. Su liquidación implica la pérdida de 900 empleos, con altos costos de indemnización, así como el cierre de cinco plantas.
La polémica entre Iragorri y Lafaurie se ha dado en medios de comunicación. Cada uno ha respondido acusaciones del otro sobre el caso Friogán y el proceso de restitución de tierras en el país.
Mientras el enfrentamiento continúa, dependerá de los acreedores que Friogán tenga un respiro financiero y que le dé viabilidad. A quienes más debe la empresa es al Banco de Occidente y el Instituto para el Desarrollo de Antioquia (Idea), con cuentas que suman 40.000 millones de pesos.
Las otras entidades acreedoras son Bancolombia, Colpatria, Bbva y el Banco de Bogotá, con deudas que están a nombre del FNG, que inyectó recursos a Friogán
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