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Todo para entender el problema de la sobretasa a la gasolina y Acpm

Esta contribución significa $2,1 billones anuales como ingreso para los municipios.

  • Foto de Santiago Mesa.
    Foto de Santiago Mesa.
Todo para entender el problema de la sobretasa a la gasolina y Acpm
02 de febrero de 2019
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Ayer una noticia que ponía en veremos la sobretasa que actualmente se cobra en el precio de la gasolina y el Acpm, puso nervioso al mercado, los analistas y los municipios del país.

¿Cómo surgió la noticia? Como producto de una investigación de tesis de grado en la que participó el abogado David Jiménez, en un programa de economía de la Universidad de Antioquia (2017), y que terminó como una demanda ante la Corte Constitucional —del artículo 121 de la Ley 488 de 1998—.

En el documento Jiménez demostró que la sobretasa que se cobra a la gasolina y al Acpm por galón no se debe aplicar debido a que la base gravable sobre la cual se calcula el tributo es una medida discrecional que cada mes plantea el ministerio de Minas y Energía, sin una fórmula clara o una norma que regule de dónde sale ese impuesto.

Lo anterior implica que se viola el principio de legalidad tributaria que “exige que sólo sean los órganos de elección popular los que puedan directamente imponer y definir los elementos esenciales de cualquier obligación tributaria”.

Y con base en esta tesis, la Corte Constitucional, le pidió al Congreso de la República que un plazo máximo de dos legislaturas se logre clarificar este impuesto y mientras eso ocurre se debe seguir cobrando tal cual sucede. Lo que al final del día implica que por ahora nada va a cambiar para el consumidor final que es quien paga el precio completo (ver Informe).

Pero no se confunda. Cuando se habla de base gravable no se habla del precio de referencia al público que usted y yo conocemos, sino, según Jiménez, un valor que define el Ministerio y sobre el que se calcula el tributo; en consecuencia “no refleja las condiciones de un mercado, es decir, de oferta y demanda, lo cual implica la asunción de un precio de venta o un precio de compra, en este caso, de un precio de venta al público” (ver gráfico).

Que esto se modifique o se elimine afecta a los municipios quienes podrían perder un ingreso significativo por este concepto.

De acuerdo con el ministerio de Minas y Energía los territorios reciben anualmente 2,1 billones de pesos por este impuesto, que en un porcentaje importante tiene una destinación específica a sistemas de transporte masivo.

En el caso de Medellín, Daniel Escobar, subsecretario de Ingresos, sostuvo que en el mismo periodo la ciudad recibe 110 mil millones de pesos por este tributo, y de este dinero 60 mil millones se destinan para pagar la deuda del Metro y 50 mil queda para el municipio y otros conceptos.

Un cambio en la fórmula

El viceministro de Energía, Diego Mesa, explicó que si bien la determinación de la Corte se da solo en un ítem de la fórmula. Hoy en día el peso de los impuestos en el precio final es de 22 %, logística 19 % y líquido 59 %.

Escobar celebra que se dé claridad a esto dado que cuando bajó el precio de referencia significativamente, por decisión de la misma entidad, el municipio dejó de recibir 4 mil millones de pesos.

Además sostuvo que sería relevante que esa norma se actualice según las nuevas realidades de los territorios, en el caso de Medellín, su preocupación medioambiental, lo que implica un cambio en los incentivos en el uso de combustibles fósiles por medios de transporte alternativos.

Sea como fuere, Mesa, recalcó que la próxima semana iniciará un trabajo técnico para buscar modificaciones de fondo en la fórmula, pero dejó claro que la gasolina hoy es más barata en Colombia que en otras jurisdicciones, como Chile, Costa Rica, México.

La idea es revisar todos los aspectos, por ejemplo el fondo de estabilización. Lo que hace es que “la volatilidad real de los combustibles no se traduzca de manera inmediata, a los usuarios; debería tener unas métricas de ahorro y de desahorro y en algún punto ser neutral, ahora no está operando de esa manera”, agregó Mesa. De hecho, el año pasado tuvo un déficit de 4 billones de pesos .

$110
mil millones de pesos recibe anualmente Medellín por la sobretasa.
Infográfico
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