En un reciente informe alojado en la National Library of Medicine, se documentó un caso médico inusual que generó interés, y preocupación, en la comunidad científica. Se trata de una joven de 19 años que presentó gigantomastia asociada a hiperplasia estromal pseudoangiomatosa (PASH), una condición poco común que afecta el tejido mamario, justo después de recibir la vacuna contra la Covid-19 de Pfizer/BioNTech.
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El caso resulta especialmente inusual debido a la rapidez y severidad de los síntomas. Según el informe, la paciente experimentó un agrandamiento masivo de las mamas una semana después de la administración de la primera dosis de la vacuna, síntomas que se agravaron tras la segunda dosis. Finalmente, el tratamiento definitivo fue una mamoplastia de reducción, procedimiento que alivió la condición.
El análisis patológico posterior confirmó la presencia de unidades lobulillares ductales terminales uniformemente densas con áreas intercaladas de PASH —Los lobulillos son las glándulas que producen leche y los conductos son los tubos que los conectan—, un hallazgo clave para el diagnóstico de este insólito caso.
Los especialistas que estudiaron este caso recalcan que la asociación entre la vacuna contra la covid-19, la PASH y la hipertrofia mamaria aún no está claramente establecida, y es necesario llevar a cabo investigaciones más amplias para entender el espectro completo de posibles reacciones adversas. Este caso es parte de un grupo reducido de eventos documentados que han despertado la curiosidad científica, pero no representan una tendencia generalizada ni deben alarmar a la población vacunada.
