El régimen venezolano intervino ayer los cuerpos de Policía en los cinco estados en los que sus candidatos a gobernadores fueron vencidos por la Mesa de la Unidad Democrática (MUD): Anzoátegui, Mérida, Nueva Esparta, Táchira y Zulia.
“Se ordena iniciar la intervención del cuerpo de policía por la presunta participación masiva de sus funcionarios en violación de derechos humanos, en redes delictivas o actividades que atenten contra el orden constitucional”, reza el más reciente decreto en la Gaceta Oficial del país vecino.
El gobierno de Nicolás Maduro designó juntas interventoras en esos cinco estados y les dio prerrogativas para someter a auditorías a todo el personal, hacer reducción de empleados o reestructuración administrativa. Incluso, dado un caso que requiera acciones “predominantemente preventivas”, el chavismo activaría el servicio de “policía comunal”.
La decisión prohíbe asimismo a los cuerpos policiales afectados la adquisición de armas y equipamiento básico durante el tiempo que dure la intervención: 180 días, prorrogables a 90 más.