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China y Rusia: unidas por 38 mil millones de metros cúbicos de gas

Panorama de la asociación de dos potencias que se conectan desde la economía con fines geopolíticos.

  • Presentación de gasoducto entre China y Rusia. FOTO: EFE
    Presentación de gasoducto entre China y Rusia. FOTO: EFE
China y Rusia: unidas por 38 mil millones de metros cúbicos de gas
03 de diciembre de 2019
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Los menos 50 grados centígrados a los que puede caer la temperatura en la región de Siberia, en Rusia, no frenaron la construcción de la Fuerza de Siberia, un gasoducto de 3 mil kilómetros con la capacidad de transportar 38 mil millones metros cúbicos de gas en un año. Ese gigante de la ingeniería que requirió a más de 10 mil hombres trabajando durante cinco años se inauguró ayer y conecta a China y Rusia en aspectos que van más allá de la infraestructura.

“Un evento realmente histórico”, así lo calificó desde Moscú el presidente ruso Vladamir Putin, mientras su homólogo chino, Xi Jinping, vaticinó que las relaciones entre ambos “son y serán una prioridad de la política extranjera” de los dos. Así, los gigantes de Asia, que comparten una frontera de 4.200 kilómetros, trazaron una unión económica en una relación en la que ambos ganan.

Ahora Rusia suministrará a China el 9,5 % del gas que necesita anualmente. Así, Moscú se fortalece en uno de los mercados de mayor interés para la administración de Putin mientras Pekín consigue el suministro que necesita de uno de los combustibles fósiles más apetecidos para poder tener la energía necesaria para sus más de 1.393 millones de habitantes.

Y es que China adquirió el compromiso que la otra potencia mundial, Estados Unidos, se niega a enlistar en sus deberes internacionales. Mientras Washington dio la espalda al Acuerdo de París, Pekín, la capital del carbón que labró el crecimiento económico a partir de la explotación del mineral, acogió las medidas planteadas por la comunidad internacional para la emergencia climática.

En su lista de acciones está generar más energía a partir de gas, reduciendo la explotación de carbón, crear centrales eólicas y fomentar los páneles solares. Con ese compromiso a cuestas, la compañía rusa Gazprom firmó con Petrochina un contrato de exportación de gas por 400.000 millones de dólares que venderán en los próximos 30 años.

Amigos por interés

“Se puede decir que las relaciones entre China y Rusia son una especie de matrimonio por conveniencia. Hay unos cálculos que ambos hacen en cuanto a las relaciones políticas, comerciales y económicas”, afirma el internacionalista ruso y profesor de la U. Icesi, Vladimir Rouvinski.

Ese camino de intereses cada vez tiene más puentes. Esta semana también inauguraron un viaducto de 19,9 kilómetros de largo que los conecta desde la ciudad rusa de Blagovéshchensk hasta la urbe china de Heihé, atravesando el río Amur, barrera natural que traza la frontera entre los dos. Su construcción demandó 28 años de negociaciones y tres de obra.

De acuerdo con la Agencia Internacional de la Energía, Rusia es el cuarto mayor exportador de gas natural detrás de Estados Unidos, Australia y Qatar. A renglón seguido, si bien China también cuenta con este recurso, es su mayor importador. Rusia, por su parte, tiene un plan de expansión con dos gasoductos más dirigidos al oeste de Europa (proyecto Nord Stream 2) y Turquía (TurkStream).

El profesor de relaciones internacionales de la U. Externado, David Castrillón, recuerda que las rutas del gas que importa China pasan por Japón, Taiwán, el Pacífico y zonas que podrían representar peligro para Pekín en un contexto de guerra, bloqueando su acceso al recurso. Si parte de su seguridad energética depende un país más cercano –ideológica y geográficamente– corre menos riesgo.

“China sabe que en un contexto de conflicto para Estados Unidos y sus aliados sería fácil ahorcar ese suministro de recursos energéticos”, afirma Castrillón. Así, dos de las potencias mundiales sellan una alianza económica marcada por sus intereses geopolíticos y un vínculo internacional que cada vez los conecta más.

55
mil millones de metros cúbicos anuales enviará Nord Stream 2 a Europa.
31
mil millones de metros cúbicos anuales enviará TurkStream a Turquía.
Infográfico
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