El demócrata Eric Adams, quien se hizo policía para luchar contra el racismo que sufrió cuando era joven, se convirtió en alcalde de Nueva York en las elecciones que se desarrollaron este martes.
En una ciudad donde siete electores votan por el partido Demócrata por uno del Republicano, y con los sondeos siempre a su favor, Adams logró ser el próximo alcalde de la mayor urbe estadounidense, con más de 8 millones de habitantes.
Anoche, al cierre de esta edición y sin confirmarse los resultados finales, cerca del 70% de los votos favorecían a Adams, quien venció en las urnas al republicano Curtis Sliwa, un pintoresco personaje fundador de la patrulla urbana de los benévolos “Angeles Guardianes”, para convertirse en el segundo alcalde negro de la capital financiera del país, después de David Dinkins (1990-93).
“A nuestros seguidores, voluntarios y patrocinadores de todos los orígenes, religiones y de todos los rincones de la ciudad de Nueva York: Gracias, desde el fondo de mi corazón, por ser parte de nuestro equipo. Esta noche celebramos, ¡porque mañana comienza el verdadero trabajo!”, escribió en Twitter el nacido en Brooklyn, quien siempre consideró que esta elección es una especie de revancha para aquel joven que coqueteó con la delincuencia y la exclusión social, así como para los neoyorquinos de familias populares.
“Ya hemos ganado”, dijo en la mañana del martes, cuando fue a depositar su voto.
Adams dejó la fuerza policial en 2006 para convertirse en senador por el Estado de Nueva York y luego en presidente del distrito de Brooklyn. Ahora, como alcalde electo deberá cumplir las promesas de disminuir la inseguridad y reducir la desigualdad. Además, gestionará un presupuesto de 98.700 millones de dólares para el periodo 2021-2022, el mayor de una localidad en EE. UU.