Una maestra de arte y un entrenador personal, son los participantes por Colombia de la nueva temporada de Supervivencia al Desnudo Latinoamérica que arranca este jueves, 13 de febrero.
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Se trata de Marcela Rentería y Wilber Rentería, los dos del Valle del Cauca, que siempre han sido apasionados por los deportes extremos, por el senderismo y montañismo, fieles televidentes de las múltiples temporadas de este exitoso reality que reúne a diez participantes de Colombia, México y Argentina en la selva del Gran Chaco, una de las regiones más desafiantes de Suramérica, que abarca territorios de Brasil, Paraguay, Bolivia y Argentina.
El reto no es nada fácil, deben enfrentar el reto de sobrevivir 21 días completamente desnudos, construyendo refugios, buscando alimento y enfrentando las duras condiciones del entorno. Más que una prueba de resistencia física, el reality pone a prueba su fortaleza mental y emocional, llevándolos al límite en la experiencia de supervivencia más extrema de la región.
Mientras que Marcela es una vallecaucana de 31 años, radicada en la ciudad de Monterrey (México), donde es profesora de arte y guía de montaña, siendo líder natural, hábil en la construcción de trampas y refugios; Wilber, conocido por sus amigos de Buenaventura como “Lukaku”, de 29 años, es entrenador personal, que siempre busca superar sus límites y mantenerse firme en sus objetivos.
Ellos, hablaron de su experiencia de ser participantes en este reality extremo, las claves para soportar las difíciles condiciones de la selva del Chaco y las enseñanzas que les dejó.
Supervivientes colombianos
¿Muy diferente lo que imaginaron como televidentes de Supervivencia al Desnudo Latinoamérica a lo que fue?
Marcela: “Una cosa es que te cuenten, que te lo digan, y otra cosa es vivirlo. Uno llega allí con un plan, con una idea de lo que puedes llegar a ser para sobrevivir, pero otra muy distinta lo que terminas haciendo para ello”.
Lukaku: “Como televidentes siempre vemos las cosas más fáciles de lo que realmente son. Cuando vemos fútbol criticamos cuando no hacen un gol o juegan mal, pero otra cosa muy distinta es estar dentro de una cancha. Así mismo es este programa. Yo admito que era uno de esos televidentes que veían el programa y lo veía fácil , ahora sé que no lo es”.
¿Qué fue lo más difícil que pasaron en estos 21 días de supervivencia?
Marcela: “Lo más difícil para mí, que fue una especie de transición, fueron los mosquitos, porque con el tiempo te van debilitando mucho y los vas sintiendo de una manera más intensa con los días. La selva del Chaco es una locura sobrevivir en un ambiente desértico semi tropical, que es una mezcla muy salvaje y agresiva”.
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Lukaku: “No sólo hablamos de los zancudos que todos conocemos, también de otros mosquitos negritos chiquiticos que uno ni lo ve pero lo siente y fastidia horrible, porque estas desnudo y te atacan por todos lados”.
¿Habían experimentado alguna vez un ambiente tan agresivo como la Selva del Chaco?
Marcela: “Yo soy del Hormiguero, que está entre el Valle y el Cauca, al lado del río Cauca y cerca de una laguna, por lo que siempre creí que estaba acostumbrada a los mosquitos, pero en el Chaco son de otro nivel.
Ahora vivo en Monterrey (México), que es una zona árida y salvaje, pero realmente no es lo mismo cuando te enfrentas a naturalezas extremas sin ropa”.
Lukaku: “Yo soy de campo, de pueblo, de monte, por lo que creía que había soportado todo tipo de bicho, pero siempre con ropa, y en el Chaco, no sólo es el hecho de estar desnudo, también la gran cantidad de mosquitos que habían. Yo nunca había visto tanto bicho, constante, no paran en ningún momento, así que eres tú quien tienes que adaptarte a ello”.
¿Qué tan difícil es sobrevivir en una selva, desnudos, y siendo grabados por una cámara?
Marcela: “Yo al principio me sentía incómoda, pero en el momento que pisas la primera espina se te olvida el mundo, porque debes preocuparte por donde caminas, qué pisas y todo a tu alrededor, por lo que se te olvidan las cámaras y todo un equipo de producción, que no interactúan contigo y son muy silenciosos”.
Lukaku: “Siento que es un reality muy natural, y yo creo que por eso seleccionan personas que estén preparadas para afrontarlo, que tengan una relación con la naturaleza y no estén pendientes de dónde está la cámara. Cada cinco minutos te estás sacando una espina del pie y te la pasas luchando con los mosquitos y viendo qué comer, por lo que la cámara es lo menos importante de todo”.
¿Cómo fue la selección para lograr hacer parte de esta temporada?
Marcela: “Te piden muchas habilidades primitivas, como saber prender un fuego, tener un método para poder filtrar el agua, saber crear un refugio, saber manejar una herramienta como el machete o hacha, así como saber nadar. Debes enviar videos mostrando tus habilidades, porque para ellos es importante certificar que los participantes tienen las habilidades necesarias para sobrevivir.
Una de mis prácticas favoritas desde hace mucho es la caminata descalza, realizando muchas cumbres, por lo que esa parte se me facilitó mucho, mientras que a mi compañera se le ampollaron los pies por no estar acostumbrada”.
Lukaku: “Yo me preparé en el río Pance, cerca de Cali, pero allí al menos tenía una pantaloneta (risas), con los pasos necesarios para construir un refugio y el manejo adecuado de un machete u hacha, porque si eres novato manejando estas herramientas, puedes generar un accidente.
Debes ser estratégico a la hora de gastar de energía, saber en dónde, cómo hacerlo y si realmente vale la pena”.
¿Descubrieron nuevas fortalezas propias?
Marcela: “Yo comí cosas que siempre dije que nunca comería, pero lo hice, todo para sobrevivir y una forma de superar mis propios obstáculos. También algunas cosas que no sabía que podía hacer, y salieron muy bien”.
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Lukaku: “Creo que es un reality donde te pone en duda algunas habilidades en las que hasta el momento considerabas que eras un crack. Cuando te llevan a terrenos que no conocer, en circunstancias muy particulares, esas habilidades pueden debilitarse, y ahí está la clave, cómo lograr superar todo eso”.
Tras esta experiencia, ¿algún sueño extremo por cumplir?
Marcela: “Me gustaría volver a vivir la experiencia, incluso de más días. Quizás un recorrido por el Amazonas profundo no estaría nada mal”.
Lukaku: “Un reconocimiento total a la naturaleza, me ha ayudado a entenderla más, y quiero acercarme más a ella, con más respeto. Muchas veces no logramos habituarnos a este tipo de ambientes porque no llegamos con respeto a ellos”.
