“Todos estamos decepcionados, como deberíamos, porque perder en casa contra el Nottingham Forest es, en mi opinión, muy malo”, declaró el capitán del Liverpool Virgil van Dijk a los medios de la Premier League.
El brasileño Murillo (33’) abrió el marcador en un saque de esquina, y su compatriota Igor Jesús creyó haber anotado el segundo del Forest segundos después, pero la acción fue anulada por mano.
La segunda mitad no pudo arrancar peor para los locales, cuando el italiano Nicolo Savona (46’) silenció Anfield batiendo al arquero brasileño Alisson Becker, de regreso a la portería tras su lesión a finales de septiembre.
También volvía tras lesión el atacante sueco Alexander Isak, titular pero que fue sustituido en la segunda mitad por el italiano Federico Chiesa (68’). Ese fue uno de los cambios con los que el entrenador neerlandés Arne Slot trataba de evitar la derrota en su 50º partido de Premier League en el banquillo de los Reds.
Sin embargo, fueron los hombres entrenados por Sean Dyche quienes golpearon de nuevo, con una magnífica acción en el área de Morgan Gibbs-White (78’).
Las sensaciones del Chelsea son radicalmente opuestas a la del Liverpool: en Burnley, con goles del portugués Pedro Neto y del argentino Enzo Fernández, los Blues sumaron su quinta victoria en las últimas seis jornadas de campeonato, y con 23 puntos se colocan a tres del Arsenal.
No fue un triunfo fácil para los Bleus, pero aprovecharon la primera ocasión clara del partido para ponerse por delante en el marcador: centro desde la izquierda de Jamie Gittens y cabezazo en plancha de Neto entrando en el segundo palo (37’).
Frente a un equipo local poco eficaz con la pelota, Neto estuvo cerca de marcar un segundo tanto, pero su derechazo se estrelló en la madera (62’).