A sus 52 años de edad, María Luisa Calle (JB-Flowerpack-Pedalea) evidencia que aún tiene fortaleza física y mental para seguir vigente en el ciclismo de alta competencia. En Colombia asombra con ese récord de longevidad.
“Desde que continúe disfrutando este deporte la palabra retiro no pasa por mi mente”. Así expresó la corredora más triunfal del pedalismo del país, quien se ha convertido en fuente de inspiración para muchas de las rivales con las que compite actualmente en la quinta edición de la Vuelta a Colombia Femenina.
En la primera fracción, entre Cómbita y Tibasosa, en Boyacá, la antioqueña, múltiple medallista en eventos de ciclo olímpico, sufrió una fuerte caída en la que se lastimó el brazo y pierna del costado izquierdo.
Una imagen que circuló por las redes, en la que se veía completamente vendada por esas zonas del cuerpo, hizo pensar que su rendimiento en su primer giro colombiano ya no sería el mejor, incluso, que podría retirarse.
Al día siguiente, en la contrarreloj de 15,3 km entre Firavitoba y Pesca, impresionó aún más al terminar en la tercera posición. “Es sobrehumana”, fue uno de los calificativos que recibió Calle, de parte de la usuaria @Mapuentes97, a través de Twitter.
“Estoy muy contenta porque es la primera vez que corro esta Vuelta, y más al ver el lote tan grande de participantes –131–. La verdad, vine a disfrutar, estoy sin presión y bastante tranquila”, dijo María Luisa, quien retornó a competencias el año pasado en los Juegos Nacionales –ganó plata– luego de cumplir una sanción de 4 años por un positivo en un control antidopaje en los Juegos Panamericanos de Toronto 2015.
“Después de los Nacionales quedé feliz con mis resultados. Si bien siempre entreno y me gusta sufrir sobre la bicicleta, seguí trabajando más fuerte para estar bien preparada. Siento que no he perdido mi forma y eso me dio confianza para actuar en esta prueba”.
María Luisa indicó que su secreto para seguir rindiendo en el ciclismo es su disciplina férrea: “Jamás dejo de montar en bici, lo disfruto, ese amor que siento por ella hace que no la abandone. Me cuido mucho, no parrandeo, me acuesto temprano, soy juiciosa en la alimentación”.
Calle dice que más allá de un buen resultado, para ella es un triunfo integrar un pelotón con tantas mujeres de nivel y de gran proyección. “Hay muchas que han estado en corriendo en Europa, eso motiva mucho. Pero también cuando otras niñas gritan cuando me ven o se me acercan a pedirme una foto o un autógrafo. Saber que despierto admiración me llena de felicidad”, agrega la paisa, quien no sabe en qué carreras vaya a estar de ahora en adelante, aunque sí tiene claro que su caballito de carbono continuará siendo su mejor complemento .
