Banksy, El artista del grafiti británico, presentó el pasado viernes una serie de tres murales calcados en las paredes de la ‘Jungla’, una población de refugiados sirios cerca de Calais, al norte de Francia. La obra pretende hacer una crítica a la situación de los migrantes de Oriente medio en Europa retratando a iconos como Steve Jobs, cofundador de Apple e hijo de un inmigrante sirio, a quién presenta escapando con una mochila en el hombro y un Macintosh en la mano.
En las obras también aparece una versión de la Barca de Medusa de Géricault, que hace memoria de un naufragio histórico. Además de la silueta de los tripulantes, Banksy ha incluido en su interpretación un Yate que navega indiferente ante la tragedia, la obra lleva el título ‘No todos estamos en el mismo barco’. Por último, instilado en una pared cercana a la playa, ha contorneado la una silueta de un niño que mira al mar por un telescopio mientras un buitre se posa en el lente.
Esta no es la primera vez que el artista se compromete con la causa Siria, en el mes de septiembre el pintor callejero desmontó Dismaland, una instalación que parodiaba el parque temático Disney World. La madera recolectada fue utilizada para construir refugios en los campos de desplazados Sirios. El creativo de Liverpool, justifico la aparición del Ceo de Apple en su obra mostrando los beneficios que ha traído el descendiente de un migrante al primer mundo: “Apple es la empresa con mayores beneficios del mundo, paga más de 7 billones de impuestos al año, y existe solo porque alguien le permitió la entrada a un joven de Homs”, concluyó en su comunicado.
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