La Copa América Centenario dejó una buena colección de anécdotas. Estas son algunas de ellas:
Un error en la previa de México-Uruguay, cuando por la megafonía del Estadio sonó el himno de Chile en vez del de la selección celeste.
Otro fallo protocolario se produjo en las pantallas del Citrus Bowl de Orlando, donde al proyectar la bandera de Bolivia se invirtieron los colores ante la sorpresa de la afición.
La pasión por Lionel Messi comprometió la seguridad cuando un aficionado irrumpió sin oposición en la cancha del estadio NRG de Houston y logró llegar hasta él para que le firmara una camiseta.
El árbitro brasileño Heber Lopes tuvo que repetir el lanzamiento de la moneda para el sorteo del partido entre Colombia y Paraguay al caer parada.
Para evitar que se repitieran los insultos a los porteros tras los saques desde el arco, la Conmebol y la Concacaf pidieron de forma conjunta que se acabaran las acciones y los cantos ofensivos y discriminatorios en los partidos al considerar que van contra el respeto al rival y no reflejan el espíritu del deporte.
La subasta de la camiseta y de un brazalete arcoiris, símbolo de la comunidad LGBT, que lució en un partido de la Copa América el capitán de la selección de Estados Unidos, Michael Bradley, alcanzó los 5.085 euros (16,5 millones de pesos) y se destinarán a las familias de las víctimas del atentado de Orlando.
El mexicano Rafael Márquez dejó por unas horas la concentración de su equipo en San José (California) para viajar a Guadalajara por el nacimiento de su hijo.
¿Con quién hablaba el árbitro? Eso se preguntaron todos cuando, tras el gol con la mano con el que Perú eliminó a Brasil, el uruguayo Andrés Cunha tardó unos interminables minutos en tomar una decisión mientras hablaba a través del micrófono con alguien. Finalmente concedió el gol de Ruidíaz entre las protestas de los brasileños.
La amenaza de suspensión sobrevoló sobre el partido entre Panamá y Bolivia en Orlando (EE. UU.) por el riesgo que suponía el paso de la tormenta tropical Colin por el norte de Florida.
Días después, la organización tuvo que suspender durante más de dos horas el inicio de la segunda parte de la semifinal Colombia-Chile por el paso de una fuerte tormenta en Chicago.
En ese mismo partido, varios fotógrafos denunciaron el robo de sus equipos profesionales y teléfonos móviles en el estadio Soldier Field de Chicag.o