El camino se hizo más y más largo mientras devoramos trochas, ríos, montañas, selva. La misión del fotógrafo Manuel Saldarriaga y la mía, fue llegar hasta el sitio exacto donde se fundaron las Farc, una colina en medio de un gran cañón. El destino: Marquetalia. Nuestro objetivo: hablar de participación política en uno de los bastiones del grupo guerrillero.
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Para llegar hasta esta zona en el Cañón de las Hermosas, viajamos 14 horas por tierra desde Ibagué. Ocurrió el 9 de agosto de 2013, y la primera parada desde la capital del Tolima es Planadas, a ocho horas de viaje en bus. Luego un chivero, atestado de campesinos, productos del campo y gallinas, te lleva en una hora hasta Gaitania y de allí, el viaje se alarga en moto por territorios donde se mueve el frente Héroes de Marquetalia de las Farc. Se llega a la vereda San Miguel una hora después.
De esta vereda a Marquetalia fueron cuatro horas con morral al hombro, libreta de apuntes, grabadoras, cámaras y un deseo ardiendo en el corazón: contar historias. Para llegar al sitio comenzamos caminando, pero las subidas y bajadas en montañas engarrotan los músculos y se siente el ardor en los pies. Entonces alquilamos caballos para llegar al sitio final.
Ya en Marquetalia, los campesinos de la zona asienten en mostrar el lugar. Son afables. En una humilde casa, en este sitio, habita una pareja de labriegos y sus hijos. Ahí están los túneles por donde escaparon “Tirofijo” y los guerrilleros de la operación Marquetalia, dirigida por el general José Joaquín Matallana. Es parte de la historia, y EL COLOMBIANO, estuvo ahí para contarla.
