Así están las cuentas de la reforma tributaria en el Congreso

Al ministro de Hacienda, Alberto Carrasquilla, le han llovido críticas por muchos aspectos de la reforma y por afirmar, en una entrevista, que una canasta de huevos en Colombia cuesta $1.800. FOTO COLPRENSA

El trámite de la Reforma Tributaria en el Congreso sumó este martes un nuevo escollo con el anuncio del partido Cambio Radical de no acompañar al gobierno de Iván Duque en esta iniciativa, que ha sido objeto de múltiples críticas de diversos sectores desde que se empezó a proponer.

En una carta publicada por la bancada en pleno de este partido, liderado por Germán Vargas Lleras, se afirma que la reforma tributaria es inoportuna y va en contravía de los objetivos de la recuperación de la economía y de la generación de empleo. También dice que la propuesta carece de unidad de materia, considerada por CR como un “requisito constitucional indispensable para el trámite de cualquier ley”.

En su carta, CR (que cuenta con 16 senadores y 30 representantes) menciona los aspectos puntuales que motivan al partido a darle voto negativo a la reforma.

Dice no a los incrementos superiores al 300 % en la tributación de los asalariados con ingresos mensuales entre los $2.5 millones y los $7.5 millones y también rechaza los aumentos de impuestos a la renta de los asalariados.

Tampoco acepta el gravamen a las pensiones ni el impuesto solidario del 10 % para los salarios e ingresos de las personas naturales. Asimismo, no lo convence la obligación de presentar declaración de renta para las personas naturales con ingresos anuales superiores a $25 millones.

También les dice no al IVA a los servicios públicos, a la tecnología, al internet domiciliario del estrato 3, a los celulares y a los computadores de baja gama.

En la misma carta, CR expone que no apoya el impuesto a la riqueza, porque “es una expropiación de los patrimonios de las personas naturales” ni tampoco va con que se les asignen impuestos a los artículos de uso íntimo de la mujer, como toallas sanitarias, tampones y protectores, entre otras.

Finalmente, Cambio Radical sostiene que estará dispuesto, “cuando se haya recuperado la economía y el empleo, a participar en la construcción de una reforma tributaria que recoja en su integridad las recomendaciones de la Comisión de Beneficios Tributarios, que no fueron tenidas en cuenta en este proyecto”.

A esta decisión de CR se suman algunas posturas de los demás partidos mayoritarios, como el Centro Democrático (19 senadores y 32 representantes), partido del Gobierno, que ha dicho estar en desacuerdo con el IVA a los servicios públicos para todos los estratos ni tampoco acepta una tasa gravable baja del impuesto de renta. Pero el CD, a su vez, ofrece total apoyo a temas como la política social del Gobierno y a disminuir la JEP (Jurisdicción Especial para la Paz).

A su vez, el Partido Conservador (14 senadores y 21 representantes) sostuvo no apoyar que se les cobre impuesto de renta a los que ganan $2.5 millones de salario mensual.

El Partido Liberal (14 senadores y 35 representantes) de entrada dijo no al IVA a los productos de la canasta familiar ni a que se graven las pensiones. El expresidente, César Gaviria, ha dicho que el gobierno de Iván Duque ya puso en marcha una operación mermelada sin precedentes para poder sacar adelante la propuesta, que recibió el lunes mensaje de urgencia por parte del mandatario de los colombianos.

Dilian Francisca Toro, del Partido de la U (14 senadores y 25 representantes), afirmó que su partido no respaldará una reforma tributaria que les asigne cargas impositivas a los trabajadores, a los pensionados y a la clase media. La U expresó que no apoya el IVA a la gasolina y a los insumos del sector agropecuario, porque esto termina afectando la canasta familiar, tal como lo han expresado algunos gremios económicos.

A los anteriores partidos, que representan las mayorías en el Congreso (108 senadores y 172 representantes) hay que sumarles la oposición anunciada por los minoritarios, como el Partido Verde (9 senadores y 9 representantes), el Polo Democrático (4 senadores y un representante) y los Decentes (4 senadores y 3 representantes), lo cual indica que el Gobierno no tiene fácil el camino para la aprobación del proyecto, que aspira a recaudar cerca de $25 billones a partir de 2022.