Justo en momentos en los que las reformas sociales del presidente Gustavo Petro cojean por los apretados tiempos del Congreso, a lo que se suma una cantada investigación en el Consejo Nacional Electoral (CNE) por supuesta violación de topes de campaña, el petrismo sigue buscando salidas para fortalecer y rodear al Gobierno, aterrizar su proyecto de cambio y afianzar las bases que le permitieron conquistar el poder.
Por ello, con la mirada puesta también en las elecciones de 2026, congresistas del Pacto Histórico –secundados por líderes sindicales y representantes de sectores sociales–, anunciaron este jueves un cambio en su estrategia de disputa política: tras agotar las movilizaciones y marchas, ahora buscan instalar asambleas.
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La cita es el próximo 31 de mayo y 1 de junio en Bogotá, en jornadas en las que, según explicó a este diario el representante Gabriel Becerra (Pacto Histórico), esperan congregar hasta a 4.000 personas. La idea, aseguró, es congregar a las bases que dieron sustento al Pacto y avanzar en tres temas fundamentales: darle vida a las reformas sociales, defender al Gobierno y rechazar cualquier “intento de golpe” –como denuncia Petro–, y avanzar en la unidad y fortalecimiento como movimiento político.
“Nuestra fuerza política y social son las organizaciones y procesos de base. Por eso, estamos uniendo tres dinámicas: la minga comunitaria (indígenas y campesinos del suroccidente); trabajadores, confederaciones de pensionados y centrales obreras, y procesos comunitarios de orden popular”, explicó Becerra, quien precisó que en los encuentros estará la bancada del Pacto Histórico.
La apuesta por asambleas está precedida por una reunión que en la noche del miércoles sostuvieron congresistas del Pacto Histórico con Petro en Palacio. Allí, según fuentes consultadas por EL COLOMBIANO, la instrucción tras más de dos horas de encuentro fue clara: hay que buscar medidas para la actual coyuntura política, atravesada por una agenda legislativa en la que se debe avanzar de acá al 20 de junio (cuando concluyen sesiones) y, particularmente, para responder a un eventual llamado a juicio político contra el presidente.
“Debemos avanzar en la amenaza que se ha planteado de atacar al Gobierno y llevarlo a juicio político, así como otros temas de desinformación sobre la gestión del Ejecutivo”, manifestó uno de los asistentes al cónclave que pidió reserva de la fuente.
Sin embargo, el tema de las elecciones de 2026 y buscar cómo asegurar otros cuatro años en el poder estaría sobre la mesa: “No se puede desconocer el escenario de 2026. La asamblea no necesariamente es para eso, pero nos puede orientar para trabajar por fortalecer un partido unitario, un solo candidato a la Presidencia y la selección listas al Congreso”.
Además de buscar cómo blindar las reformas sociales del Gobierno, durante las asambleas de fin de mes –que se desarrollarán en Bogotá, aunque no se ha definido el sitio–, las bases petristas van a plantear además estrategias que permitan concretar el acuerdo nacional del que habla Petro hace meses.
“Debemos tener una conversación franca, constructiva y unitaria como parte de un proceso que ayude a precisar contenidos, tácticas, metodologías, planes, rutas, acciones y estrategias para avanzar en espacios de organización, representación, gobierno y construcción de un nuevo poder popular y democrático en la sociedad”, explicaron este jueves las organizaciones desde la Plaza de Bolívar.
La invitación quedó formalizada tras una rueda de prensa que contó con la presencia, entre otros, de Fabio Arias, de la Central Unitaria de Trabajadores, el exgobernador Carlos Caicedo y congresistas como Gloria Flórez, Aída Avella o Clara López.
“Queremos avanzar en activar los sujetos y comunidades populares, allí donde estén y con las agendas y necesidades propias, en clave de poder constituyente e impulso a un gran diálogo y acuerdo nacional más allá de las élites y con la presencia protagónica del pueblo”, precisaron.