Sobre una hoja blanca, posteriormente manchada con sangre, el reconocido estilista Mauricio Leal se habría despedido de sus seres queridos: “Los amo, perdóneme, no aguanto más, a mis sobrinos y hermano dejo todo, con todo mi amor, perdóname mamá, 11.24”.
La carta, encontrada en la cabecera sobre el lado derecho de la cama, sería la prueba de que los cuerpos del estilista Leal y de su madre, Marleny Hernández, se encontraban allí por un suicidio. Sin embargo, la Fiscalía determinó el 15 de diciembre pasado que se trataba de un doble homicidio, por lo que constatar la veracidad del documento se convirtió, aún más, en un factor clave.
Aunque el análisis grafológico inició tras descubrirse la carta, la Fiscalía apenas dio a conocer los hallazgos este 17 de enero, en la audiencia contra el hermano de Leal e hijo de Hernández, Jhonier Leal, principal sospechoso de los hechos y acusado por los crímenes.
Durante el relato de acusación, el fiscal delegado Mario Burgos confirmó que la carta había sido escrita por Mauricio. El estudio de sus últimas letras, comparadas con las escritas en un pagaré, un cuaderno argollado con pasta de color verde y una libreta con pasta dura de color blanco, arrojaron la certeza de una de las pruebas que, al menos ante el ojo público, parecían ser más reveladoras.
Sin embargo, los investigadores encontraron que el estilista habría sido presionado al momento de escribirla, pues cuenta “con caracteres alfabéticos sobrealzados, irregulares, pausados, con repisamientos, desproporción de signos y falta de orden espacial, cambios en la presión dejando trazos incoloros y otros más intensos con mayor descarga de tinta”, apuntó el fiscal en la audiencia.
Posterior a la revelación de este hallazgo, el delegado del ente investigador señaló que Jhonier Leal habría presionado a su hermano para que escribiera la carta, proporcionándole un “sinnúmero de heridas en los brazos y en la nariz” que impidieron una escritura más firme.
Aunque Jhonier se declaró inocente durante la audiencia del lunes –que continuará en la tarde de este martes–, el fiscal Burgos aseguró que existe toda la evidencia, no solo de su responsabilidad en el doble homicidio sino del intento de borrar las pruebas del hecho, puesto que “no hay crimen perfecto”, sentenció.
“Jamás hubiese sido capaz de poner una mano encima de mi madre y de mi hermano, por ende no acepto la imputación de cargos”, dijo finalmente Jhonier, luego de reunirse con su defensa tras el relato de acusación.