Tras los cuestionamientos en que se ha visto envuelta desde el fin de semana pasado, la mayor activa del Ejército y actual magistrada de la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia, Cristina Lombana, quien lleva el proceso judicial del senador y expresidente Álvaro Uribe Vélez, aseguró en un comunicado que no está impedida para investigarlo.
En el escrito divulgado este martes, Lombana respondió al columnista de la Revista Semana Daniel Coronell, quien aseguró que ella sostuvo nexos laborales con Jaime Granados, actual defensor del expresidente, y no lo comunicó a la hora de aspirar a la plaza en la corporación.
En la misiva, la magistrada explicó que “en el evento concreto que señala, no incluí tal experiencia, simplemente, porque no podía probarla. Así se lo hice saber, de manera oportuna, al periodista Daniell Coronell a quien le precisé, además, que traté de obtener esa certificación para incluirla en los documentos presentados desde mi primera postulación a magistrada de la Corte en el año 2015”.
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Lombana, quien tiene en su despacho la investigación contra Uribe Vélez y en los últimos meses ha tomado decisiones sobre la misma, explicó que no ha negado ni en público ni en privado la “fugaz experiencia” de tres meses que obtuvo en la oficina de Granados.
De hecho, el 16 de enero de 2019, en la Sala Especial de Instrucción quedó constancia de esta información: “La doctora Cristina Lombana Velásquez informó a la Sala la relación que tuvo hace más de 20 años con el abogado Jaime Granados Lombana”.
La magistrada, a quien en septiembre del año pasado sus superiores le impusieron la medalla Fe en la causa, agregó que desde 1997 no volvió a tener relación personal, ni profesional con el defensor del senador. Tan solo lo volvió a ver en las diligencias que se adelantan en contra del jefe del Centro Democrático.
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Bajo ese entendido, al no conservar relación alguna con la parte, la magistrada expresó que tal situación no constituye causal legal de impedimento para apartarse del conocimiento de los procesos judiciales en los que ha participado Granados.
Pese a que hizo tal apreciación, Lombana manifestó que de registrarse de parte de los accionantes cualquier tipo de impedimento para conocer de los hechos del senador, “estos cuentan con las herramientas jurídicas para tramitar las inquietudes”.
Hasta el momento, la magistrada ha dejado ver su postura frente a dicho caso por medio de sus decisiones, pues descongeló el llamado a indagatoria que en algún momento fue pausada por el mismo senador tras poner un recurso de nulidad de su proceso.
