<img height="1" width="1" style="display:none" src="https://www.facebook.com/tr?id=378526515676058&amp;ev=PageView&amp;noscript=1">
x
language COL arrow_drop_down

Las contradicciones que deja la novela de María Isabel Urrutia por “firmatón” en Ministerio del Deporte

Petro la tildó de “indelicada” por firmar 360 contratos por $16 mil millones. Ella dice que eran necesarios para operación del Ministerio. Casa de Nariño dice que no la autorizó. Investigan.

  • Tras su salida forzada, Urrutia habló de su despido y dijo, entre otras, que había hablado con la jefe de gabinete de la Presidencia, Laura Sarabia, para acordar que su salida se diera el próximo lunes 13 de marzo, más de una semana después de que el jefe de Estado le pidiera la carta de renuncia. FOTO: CORTESÍA
    Tras su salida forzada, Urrutia habló de su despido y dijo, entre otras, que había hablado con la jefe de gabinete de la Presidencia, Laura Sarabia, para acordar que su salida se diera el próximo lunes 13 de marzo, más de una semana después de que el jefe de Estado le pidiera la carta de renuncia. FOTO: CORTESÍA
08 de marzo de 2023
bookmark

La controvertida salida de María Isabel Urrutia del Ministerio del Deporte, una novela que involucra un posible caso de corrupción y contradicciones entre la ahora exfuncionaria y la jefa de Gabinete, Laura Sarabia, tiene como telón de fondo la firma de 360 contratos entre el 28 de febrero y el 6 de marzo por $16.339 millones.

La razón es que el presidente Gustavo Petro la declaró insubsistente por lo que calificó como “actuaciones indelicadas”, ya que desde la noche del lunes 27 de febrero anunció su salida del cargo y, por ende, no debería firmar contratos. Pero ella aseguró que le entregó una carta a Sarabia indicando que dejaría el ministerio desde mediados de marzo y que, con base en esa continuidad, sí tenía la facultad contractual.

No obstante, la jefa de Gabinete de Petro la desmintió diciendo que desde el primero de marzo Urrutia ya estaba notificada de su salida.

Y, para darle más color a un enredo político y administrativo que por la cantidad y monto de los contratos terminó en estrados judiciales, el decreto de nombramiento de la nueva líder de la cartera de Deportes, Astrid Rodríguez –que legalmente oficializa la salida de Urrutia–, está fechado del 6 de marzo.

Esto quiere decir que alguna de las partes miente. Incluso, EL COLOMBIANO le preguntó a Mauricio Lizcano, director del Departamento Administrativo de la Presidencia –entidad encargada de tramitar estos procesos–, por qué si Petro sacó a Urrutia desde el 27 de febrero, y según el relato de Sarabia se le notificó desde el 1 de marzo, no se designó al menos un encargado vía decreto para que se ocupara en esa transacción del ministerio. No obstante, al cierre de esta edición, no respondió y lo cierto es que la nueva funcionaria asumió desde este martes. ¿Quién responde, entonces, por los demás días que están en el limbo?

Pero mientras ese enredo se resuelve y se logra determinar qué parte dice la verdad a medias, la Procuraduría y la Contraloría comenzaron un barrido a los 360 contratos que firmó Urrutia en ese lapso final en el Ministerio del Deporte.

De hecho, desde esa cartera, le aseguraron a este diario que aunque Urrutia fue removida el 27 de febrero, la medallista olímpica siguió yendo a la sede del Ministerio bajo la excusa de alistar todo para el empalme con la nueva ministra. No obstante, según una fuente, “el Presidente le advirtió a Urrutia que no diera declaraciones, que estaba desautorizada”.

Y de acuerdo con una versión dada por voceros de la Casa de Nariño, desde el mismo día n que se hizo la alocución en la que se notificó al país su salida, supuestamente, se le pidió frenar la firma de contratos.

Ella, sin embargo, dijo a medio que lo hizo para mantener el funcionamiento administrativo del Ministerio y que le tocó, de acuerdo con su versión, hacerlo solo hasta estas fechas porque antes no había sido notificada del presupuesto. Además, cuando se le cuestionó porque varios de esos procesos se registraron en las plataformas públicas a la media noche, tal y como lo reveló este diario, ella se limitó a justificar que “a esa hora el Secop es más rápido”.

En todo caso, la Procuraduría alista un llamado a declarar de Urrutia para analizar disciplinariamente su gestión frente al tren de 360 contratos que firmó en solo 7 días. Y la Secretaría de Transparencia de la Presidencia advirtió que entre enero y marzo de este 2023 los contratos firmados por Urrutia suman $21.494 millones, lo que se traduce en que cerca del 70 por ciento de ese monto los avaló justo en la semana que ya sabía que se iba.

El empleo que busca está a un clic

Te puede interesar

Las más leídas

Te recomendamos

Utilidad para la vida

Regístrate al newsletter

PROCESANDO TU SOLICITUD