El equipo de abogados de la defensa de Santiago Uribe Vélez tratará durante esta semana de persuadir al juez primero penal del circuito especializado de Antioquia acerca de su inocencia, para ello el principal argumento es que se trata de un montaje político, por lo que intenta minar la credibilidad de los testigos.
Esta es la última semana del juicio y por eso el bufete de Jaime Granados está empeñado en desvituar las declaraciones acerca de su presunta participación y liderazgo en “los 12 apóstoles”.
Esto teniendo en cuenta que el mes pasado la Fiscalía, la Procuraduría y la parte civil en representación de las víctimas pidieron condena por el delito de concierto para delinquir agravado, por la conformación del grupo paramilitar “los 12 apóstoles” que operaba en Yarumal (Antioquia).
De acuerdo con el ente investigador, la credibilidad de sus testigos, especialmente el mayordomo Eunicio Pineda y el mayor (r) de la Policía Juan Carlos Meneses, es irrefutable y hay suficiente material probatorio para demostrar la culpabilidad de Santiago Uribe.
“El designio criminal era el de asesinar a los que ellos llamaban indeseables sociales, entre los que se encontraban guerrilleros, auxiliadores de la guerrilla, ladrones, extorsionistas, secuestradores, expendedores de droga, drogadictos, entre otros”, aseguró la Procuraduría en diciembre pasado en sus alegatos finales, en los que pidió condena por considerar probada su culpabilidad.
Pero el ente de control pidió la absolución por el delito de homicidio, ya que “se presenta duda razonable en relación con la responsabilidad de Uribe”.
Por eso, la Fiscalía cambió el cargo de homicidio agravado en la persona de Camilo Barrientos (1994), por coautoría mediática de una organización de poder, como presunto responsable de unos 500 asesinatos que cometió ese grupo armado. El juez no ha indicado si admite la modificación.