¡Pilas con Maduro! HRW le hizo “recomendaciones” a Petro sobre diálogos con Venezuela

En una carta enviada hoy, la ONG le pidió al gobierno colombiano que le haga algunas exigencias humanitarias al régimen de Maduro antes de sentarlo como garante de las negociaciones con el ELN.

El pasado 29 de agosto, Armando Benedetti se posesionó como embajador de Colombia en Venezuela.

El propósito de la misiva es “instar” al gobierno colombiano de que en el marco del restablecimiento de las relaciones diplomáticas con el gobierno de Maduro se mantenga “firmemente enfocado en abordar la crisis humanitaria y de derechos humanos en Venezuela”.

Para la organización con sede en Washington, en sus conversaciones con el gobierno de Maduro, Colombia debe priorizar los compromisos concretos de las autoridades venezolanas para respetar los derechos humanos; apoyar que ingrese más asistencia humanitaria; restablecer el Estado de derecho; terminar con la complicidad de las fuerzas de seguridad venezolanas con el Ejército de Liberación Nacional (ELN); y abordar la violencia, los abusos y la trata de personas en la frontera entre ambos países.

En la comunicación, firmada por la excongresista colombiana y ahora directora de la organización para Las Américas, Juanita Goebertus, le recuerdan al presidente Petro que más de 7 millones de venezolanos han tenido que “huir” de su país a causa de la crisis humanitaria. Y que la Misión Internacional de las Naciones Unidas de Determinación de los Hechos sobre Venezuela ha concluido que existen “motivos razonables para creer que se han cometido crímenes de lesa humanidad” por parte de las autoridades venezolanas, incluyendo asesinatos, detenciones arbitrarias y torturas.

También destacan que, a pesar de los desafíos que ha representado para el país la llegada masiva de venezolanos, la respuesta de Colombia ha sido hasta ahora “mayormente ejemplar”.

Por último, Human Rights Watch le hace 4 recomendaciones concretas al gobierno colombiano para encarar su nueva relación con su vecino.

La primera de estas recomendaciones es “promover avances para los derechos humanos en Venezuela” pues para la ONG, el restablecimiento de relaciones entre Colombia y Venezuela no es un motivo para guardar silencio ante las violaciones de derechos humanos y la crisis humanitaria en el país. Según han documentado diferentes organizaciones independientes, en Venezuela se siguen hostigando y procesando injustamente periodistas y opositores políticos, muchos de los cuales han sufrido torturas como descargas eléctricas o violencia sexual. Además, se han llevado a cabo ejecuciones extrajudiciales y otros crímenes de lesa humanidad.

HRW también le pide al Gobierno que promueva mayor ayuda humanitaria por parte de la comunidad internacional y que, aprovechando el acceso que tiene a las autoridades venezolanas, les solicite una implementación efectiva de esa respuesta humanitaria desligada de fines políticos.

La segunda recomendación, facilitar negociaciones genuinas para restablecer el Estado de derecho. Para HMW, la relación actual entre el Gobierno de Petro y el de Maduro ponen al ejecutivo colombiano en una “posición única” para impulsar una negociación real entre el mandatario venezolano y los líderes de la oposición de ese país para la celebración de unas elecciones presidenciales justas y libres.

Las últimas conversaciones de Maduro con la oposición que se llevan a cabo en México con Noruega como garante, están formalmente suspendidas desde la extradición a Estados Unidos del empresario colombo-venezolano Álex Saab.

“Abordar la violencia y los abusos en la frontera” es la tercera recomendación. Desde 2018, Human Rights Watch ha documentado múltiples abusos cometidos por grupos armados en la frontera entre Colombia y Venezuela, en particular, en la región de Catatumbo y el departamento de Arauca en Colombia, y el estado venezolano de Apure.

Allí, varios grupos armados, incluido el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y disidencias de las antiguas Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc), han cometido asesinatos de líderes sociales y otros civiles, reclutamiento de menores, violencia sexual, desplazamiento forzado y otros graves abusos. Las investigaciones de la ONG sugieren que miembros de las fuerzas de seguridad venezolanas, en particular la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb) y la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), han llevado a cabo operaciones conjuntas con combatientes del ELN y han sido cómplices en sus abusos.

Asimismo, HRW reconoce que la política de “Paz Total” promovida por el Gobierno del Pacto Histórico podría ayudar a promover los derechos humanos si se implementa adecuadamente, sin embargo, advierte que cualquier política de seguridad enfrentará desafíos inmensos si los grupos armados en Colombia pueden usar a Venezuela como retaguardia estratégica y actuar con la colaboración o aquiescencia de las fuerzas de seguridad de Venezuela.

Por último, en la carta que también está dirigida al canciller colombiano Álvaro Leyva, al ministro de defensa, Iván Velásquez y al ministro del interior, Alfonso Prada, la organización le encomienda al presidente Petro “enfrentar la trata de personas”.

Desde 2019, Human Rights Watch ha documentado casos de trata de víctimas venezolanas, sobre todo en la frontera. Muchas de estas personas, en su mayoría mujeres y niñas, son víctimas de explotación sexual; por ejemplo, aunque no únicamente, en “casas webcam”. La información oficial disponible, aunque es limitada, sugiere que hubo un aumento de estos casos en los últimos años.

Si bien las autoridades colombianas han dado algunos pasos para responder a estos delitos, por ejemplo, estableciendo comités municipales y departamentales contra la trata de personas y formulando una estrategia específica para que la Fiscalía investigue y persiga penalmente estos abusos, estos esfuerzos han sido “insuficientes” para la organización.

La carta termina con un mensaje en el que la organización le dice al presidente Petro que confía en que tomará en cuenta sus recomendaciones dentro del proceso del restablecimiento de las relaciones diplomáticas con Maduro.