Como Carlos Emilio Ibargüen Palacios, de 27 años, y Jhoan Stiven Carreazo Asprilla, de 23, fueron identificados los dos colombianos condenados en Estados Unidos a 45 y 50 años de prisión, respectivamente, por contrabando de personas. Así lo informó este lunes el Departamento de Justicia de ese país.
Los hechos por los que fueron condenados ambos hombres sucedieron en 2016 y fueron calificados por la Oficina de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI, por siglas en inglés) como “uno de los casos más fríos e insensibles investigados en Miami”.
De acuerdo con el expediente judicial, Ibargüen y Carreazo se dedicaban desde al 2014 al tráfico ilícito de extranjeros ilegales a través de Colombia hacia la frontera panameña, en ruta a los Estados Unidos. En 2016, tres ciudadanos cubanos, dos hombres y una mujer, acordaron y pagaron a los acusados con la intención de llegar a Miami.
El 7 de septiembre de 2016, ya en la frontera de Colombia con Panamá, los tres cubanos abordaron un barco capitaneado por Ibargüen Palacios. Tras una demora, a ellos se unió Carreazo Asprilla. Durante el viaje, los hombres colombianos desenfundaron un cuchillo y una pistola y asesinaron, cortándole la garganta, a uno de los hombres. La misma suerte correría la mujer, a quién según las autoridades, primero agredieron sexualmente.
Todo esto lo relató a las autoridades el tercer hombre, sobreviviente de la tragedia, que logró escapar tirándose al mar y nadando hasta la playa más cercana. Allí fue descubierto por un pescador local y rescatado por la Armada colombiana. El Departamento de Justicia declaró que la investigación fue llevada a cabo en colaboración con el Gobierno de Colombia y la Fiscalía General.
“Aunque las sentencias no devolverán a las víctimas a sus seres queridos, sí hace justicia para sus amigos y familiares. HSI continuará investigando agresivamente, persiguiendo y cerrando a estas organizaciones que están involucradas en este horrible acto criminal”.
