“Reconozco que como líder y representante internacional de este país he fallado. Muchos hemos fallado. En este momento debe ser un llamado a la reflexión, pero sobre todo a la acción”. De esta forma, la canciller de Colombia, Laura Sarabia, hizo un mea culpa como funcionaria luego del atentando del que fue víctima el precandidato presidencial, Miguel Uribe, tras el atentado del sábado en el barrio Modelia, en Bogotá.
“No más violencia. Este debe ser el mensaje en que debemos confluir todos desde diferentes rincones diferentes sectores y posiciones políticas de Colombia. No más violencia desde el discurso de redes sociales, no más violencia en el maltrato por la diferencia de ideas, no más violencia que nos distancie del objetivo de hacer la paz”, dijo la ministra en un video de poco más de cinco minutos en donde se le nota muy impactada e invita a las delegaciones diplomáticas para que acompañen al país en este difícil momento.
En su visión como funcionaria del gobierno de Gustavo Petro, sostuvo que: “Desde nuestra esquina, este atentado es un llamado a nuestras responsabilidades, nos compromete a trabajar incansablemente por corregir nuestros errores, por desescalar el discurso que incita al odio y a la ira en público y en privado”.
Sarabia insistió en que hay que “erradicar el odio desde el lenguaje y el trato cotidiano... No más violencia. Este debe ser el mensaje en que debemos confluir todos desde diferentes rincones diferentes sectores y posiciones políticas de Colombia. No más violencia desde el discurso de redes sociales, no más violencia en el maltrato por la diferencia de ideas”.
“Mantener la crítica con argumentos y respeto es vital para avanzar y para que nuestros hijos y nuestras generaciones puedan evitar lo que la historia nos dejó. Esta no es una lucha por colores o por partidos, es una lucha por la vida”, aseveró la canciller.
Para la ministra “la autoridad es del ejercicio de gobierno, es también reconocer el valor del otro y lo que tenga que decir es reconocer sus ideas y su amor. Desde Colombia hacemos un llamado urgente a la comunidad internacional a quien agradezco su solidaridad en este caso. Agradezco los mensajes de apoyo y él siempre apoyo nuestro país”.
En tal sentido indicó que “he convocado a la CELAC, a todos nuestros embajadores y a los embajadores acreditados en Colombia para que se unan al clamor del pueblo colombiano en la búsqueda de la paz y en la garantía de la democracia. Debemos trabajar para promover la paz. Es una responsabilidad colectiva garantizar que la democracia prevalezca y que cada vida sea valorada y protegido”.
Insistió en que “no podemos aniquilar la diferencia de pensamiento, no podemos aniquilarlos entre nosotros y no nos vamos a quedar con los brazos cruzados mientras la violencia amenaza nuestro futuro, mientras la violencia aún nos llena de miedo. En estos momentos difíciles es crucial que todos los colombianos nos unamos como una sola nación”.
La ministra sostiene además que “esta no es una lucha por colores o por partidos, es una lucha por la vida. A pesar de los desafíos que enfrentamos Creemos firmemente en la capacidad de nuestro país para superar la adversidad. La historia de Colombia está llena llena de ejemplos de resiliencia y fortaleza. Con determinación y solidaridad podemos construir un futuro mejor. La esperanza es nuestra guía y sobre todo la paz es nuestro destino. Solo a través del respeto, la unidad y la cooperación podemos superar los desafíos. Reitero, debemos desescalar el lenguaje de odio”.
Concluyó su declaración diciendo que “para que esa paz que sobrepasa todo entendimiento en los colombianos cabemos y necesitamos todas las posiciones e ideas. porque lo que nos hace un país más heterogéneo, que un país diverso, lo que nos hace el país de la belleza. En este momento de dolor, de profundo dolor, debemos reflexionar y hacer que el odio se transforme en empatía. Continúo con mi compromiso de ser un agente de cambio, promoviendo el respeto y la inclusión y la paz, pero sobre todo diciéndole no a la violencia”.