Los presuntos abusadores serían seis estudiantes que cursaban el bachillerato. Toda la comunidad educativa se manifestó contra la situación: hubo desmanes.
En la localidad de Kennedy, en Bogotá, los vecinos del Colegio Codema se despertaron escuchando gritos que pedían justicia y unas rejas siendo empujadas.
Y es que, este jueves, familiares de varios estudiantes entraron a la fuerza en la institución educativa para pedir justicia por el presunto abuso sexual que sufrió una menor de 8 años a manos de seis estudiantes de bachillerato. El hecho se presentó el pasado martes 22 de julio.
“Yo la recojo, cuando ya veníamos caminando, yo siento algo extraño en ella y yo le pregunto ¿qué pasa? ¿qué tiene?, y entonces me tiene más confianza y me dijo que la habían tocado, que la habían lastimado mucho, mucho dolor en sus senos y en sus partes íntimas”, dijo la mujer que recogió a la menor en el colegio.
Algo que agrega más dolor al relato, es que sus abusadores no solo la violentaron y lastimaron físicamente, sino que la niña dijo que habían grabado todo con sus celulares.
“El principal fue un muchacho grande, ella me dice que es grande, me manifestó, y creo que es de bachillerato porque no hay niños tan grandes en primaria (...) me dice que después de todo lo que le hicieron le intentaron dar una bebida con un polvo y ella no lo tomó, después de que ese muchacho le hizo esas aberraciones llama a cinco niños más, o sea, en total son 6, uno de ellos le tomó fotos en sus partes íntimas”, agregó la mujer en declaraciones a medios.
Por el momento, no hay información de quiénes fueron los responsables y si ya hay un proceso judicial en su contra. La Secretaría de Educación distrital aseguró que, el martes, la niña fue atendida por funcionarios de salud siguiendo el código blanco.
Además, señalaron que ya se informó al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar y a la Fiscalía General de la Nación para que tomen medidas en el caso.
Las protestas pidiendo justicia se han mantenido durante dos días. “¿Situaciones que se pudieron prever?, sí, ¿Qué al colegio le quedó grande darle la seguridad a los niños?, sí”, le dijo Alejandra Díaz, una de las madres de una compañera de la víctima, a City Tv.
Con gritos de “las niñas no se tocan”, los padres expresaron su preocupación. Según lo que contaron, el miércoles, el colegio envió a los menores de edad a sus casas más temprano, asegurando que había un problema con el acueducto.
Pero para los padres, eso no es cierto: “Querían vernos la cara, no querían decir la verdad”, le dijeron al medio citado. Y es que, al parecer, no es la primera situación de abuso o peligro de índole sexual que se presenta en el colegio.
“Hace cinco años, los niños de cuarto-quinto ya veían pornografía acá. Se les avisó, les dijimos que por favor hagan una charla de educación sexual (...) enseñémosles que eso no es así”, dijo Díaz en su entrevista televisada. Por el momento, el colegio no se ha pronunciado.
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