El corazón de muchos usuarios del Metro latió más despacio este viernes, luego de que un perro entrara a las vías férreas en el tramo entre Aguacatala y Ayurá. La angustia fue porque un tren se acercaba a la parada y tuvo que detenerse para no atropellar al canino.
Este particular hecho ocurrió alrededor de las 8:20 a.m. y fue registrado por algunos pasajeros. El perro no fue atropellado porque la empresa activó inmediatamente el protocolo de frenado, al percatarse del inusual visitante, e incluso el conductor del tren que pasaba por allí se bajó para tratar de agarrar al esquivo animalito.
Su esfuerzo no tuvo recompensa. Tuvieron más fuerza y velocidad las cuatro patas del canino, que regatearon a su perseguidor, que solo tenía dos, y ante la mirada de la gente en la estación fue dejándolo atrás en las vías.
La empresa incluso llamó al biólogo del sistema para que estuviera presente y así salvaguardar la integridad del animal y poder rescatarlo.
“Me dieron 10 infartos viendo este video. ¿Cuenten qué pasó con el perrito?”, escribió Daniela en su cuenta de Twitter @Davaga28. Así como ella, fueron muchos los internautas mostraron preocupación por el desenlace de la historia.
Por eso, el Metro contó con detalle qué pasó al final con el canino: “Luego de muchos ires y venires por las vías y de intentos infructuosos por atraparlo, el perrito salió por cuenta propia a través de un desagüe y ya no está en riesgo en el sistema. Ya se le vio caminando tranquilo por fuera”, indicó.
Diez minutos después de la intromisión del perro, los trenes normalizaron su marcha entre las estaciones de Aguacatala y Ayurá.
El protocolo del Metro
“Siempre que los conductores u operadores de estación detectan animales en la vía, el operador de línea le da la orden a los conductores de reducir la velocidad en el tramo y conducir en ‘marcha a la vista’ (a menos de 40 km/h), así les da tiempo de frenar si es el caso”, explicó la empresa.
Luego de eso, como sucedió en el caso antes mencionado, se llama al biólogo para que llegue a la estación a capturar y retirar al animal. Si es fauna silvestre se entrega al Área Metropolitana. Si se trata de perros y gatos, la encargada de su cuidado es el Centro de Bienestar Animal La Perla de la Alcaldía de Medellín.