La Policía Metropolitana del Valle de Aburrá y la Fiscalía General de la Nación en un operativo conjunto incautaron 54 kilos de clorhidrato de cocaína en una finca ubicada en zona rural de Barbosa.
La droga estaba oculta en empaques de productos de belleza con destino a Europa, donde se esperaba que fuera comercializada por un valor cercano a los $3.000 millones.
Durante la diligencia de registro y allanamiento, las autoridades encontraron, además de la cocaína, 26 litros de ácido clorhídrico y equipos especializados para la producción de la sustancia. El laboratorio clandestino desmantelado estaba siendo utilizado para el procesamiento de la droga, que luego era enviada a Europa en grandes cantidades.