Casi todas las mamás paisas han recurrido a la técnica de pedir los “piecitos” de cuanta mata ven bonita, para así poder sembrarlas en sus casas.
“A mi abuela le encantan, ¡a la terraza de mi casa ya no le cabe una mata más!”, dice Melissa Alzate desde su cuenta de Twitter @MeliAlzate.
No obstante, los viveros también son una buena opción para adquirirlas y para conseguir los implementos necesarios para el cuidado. Esta semana la Twittercrónica visitó dos de estos lugares al sur de Medellín.
Tierra Negra
Calle 7d # 43a - 15, El Poblado
En medio de decenas de edificios y como “una extensión” del Parque Lineal La Presidenta, una esquina de la Milla de Oro parece ser un jardín rebelde que desafía al cemento.
Al entrar a este lugar en la mañana, los empleados corren de un lado a otro ordenando, regando y puliendo detalles de la amplia exhibición de flora que tienen. “Como somos productores, eso nos da la gran ventaja de tener siempre plantas en muy buen estado, frescas y que van a durar mucho tiempo. Además, podemos vender muy barato”, afirma Liliana María Ospina, encargada de este espacio desde hace 20 años.
Esta mujer es una sabia del cuidado de las matas. Dice que lo aprendió todo trabajando en este lugar al que le entrega su mejor energía. Liliana dice que cualquier planta es fácil de cuidar y que la clave está en saber cuándo hay que echarles agua “uno simplemente les toca la tierra, si está húmeda hay que dejarla quieta, pero si no, hay que regar”.
Otro tip que da, es que las plantas de interiores nunca deberían ponerse directamente al sol, pues se les pueden quemar las hojas. Es más, agrega que en las casas en donde poco entra el sol y que no tienen tantas corrientes de aire, las matas se conservan mejor.
En este lugar se pueden comprar plantas desde 1.200 pesos y macetas de barro desde 2.500. Las petunias las venden en promoción, tres por el precio de dos y las suculentas, “la planta de moda” se consigue a partir de 3.200 pesos en sus diferentes especies.
Para las oficinas o para personas que no tienen mucho tiempo para dedicarse a la jardinería, Liliana recomienda tener cactus y suculentas porque no necesitan mucha agua para vivir. Como lo trina @LaberintoTienda “ Los cactus son fáciles de cuidar, muy agradecidos y ¡súper decorativos!”.
Calle 2 Sur #67 - 210, Guayabal
Sobre la avenida 80, y como el vecino más cercano del aeropuerto Olaya Herrera en el costado sur, está este vivero.
Al traspasar la puerta de la entrada, una selva verde compuesta por pequeños materos invaden la vista.
Todo huele a tierra, pureza y campo. Parece inverosímil que entre tanto movimiento de aviones y de tráfico, haya un espacio como este. Al recorrerlo, no solo las plantas se roban la atención, también la cantidad de adornos entre los que se ven diversas figuras de patos, hongos, hadas... y en medio del recorrido está la pequeña oficina de su dueño, Tito Gómez Montes, un experto en jardinería y defensor acérrimo de los recursos naturales.
Para Tito, las personas que van a ese lugar con 10 años de historia, van por seres vivientes que sienten y que requieren cuidados que van más allá de regarlas. “Ellas se comunican con las personas que poseen virtudes especiales”, agrega.
En medio de uno de sus corredores, se ve un letrero grande que dice “Mi Aula Ambiental”, porque Tito recibe estudiantes y les da cátedra sobre la importancia de las plantas. Los adultos mayores también visitan este espacio con frecuencia, hay un lugar acondicionado para ellos, con bancas y un mirador (hacia el aeropuerto) en el que pueden disfrutar del vivero.
En Plantas Lindas las personas pueden comprar gran variedad de matas (tienen más de 3.000 especies, según Tito), unas tan escasas como el bambú de buda y otras tan populares como las bifloras, bromelias o las veraneras. También venden materas, desde 2.000 pesos, elementos decorativos para jardines como sillas y piedras, y otros productos para el mantenimiento, como abonos orgánicos.
En este lugar no hay cabida para los químicos, tanto así que tienen una habitación dedicada a la elaboración de composta, muy cerca de la figura de una curiosa jirafa cuyo cuello rebasa la reja del lugar.
Así, tanto Tierra Negra y Eco Vivero Plantas Lindas, son una clara muestra de que la tradición de tener un poco de verde en el hogar sigue vigente, como dice Tito “un jardín no tiene que ser enorme, una simple flor o un cactus en un rincón de la casa también es un jardín”.
