Es un hecho preocupante. Había unas disidencias armadas, incluso antes del acuerdo de paz, que sumaron 23 grupos con presencia en 85 municipios. Ya estaban vinculadas a los carteles de la droga. Ahora llega esta disidencia política, después del proceso de paz, con críticas a la implementación y los sucesos en torno a Santrich, además de las discusiones en torno a la paz.
Al juntarse estas dos disidencias (política y armada) ya forman un grupo con características de guerrilla, con todo y lo degradada que esté. Y en coincidencia con el Eln para establecer alianzas. Hace 20 días teníamos información de esto y ya se sabe del acercamiento Farc - Eln en las regiones. Esperaban estar más organizados, pero al quedar en evidencia salieron a dar el mensaje y el video.
Hablamos de unos 1.800 exFarc y más de 3.000 miembros del Eln, o sea unos 5.000 hombres. No serán tan potentes como las Farc en su momento, pero serán un factor muy perturbador.
La culpa, la responsabilidad es en un 70 % de los que se van. Los procesos de paz tienen muchas dificultades.
Y eso de que será una guerrilla respetuosa de la población civil es retórica. Cada ciclo de violencia es más degradado que el anterior. Esto será peor y más difícil.
