La tensión en Oriente Medio dio otro salto este lunes tras el lanzamiento de misiles por parte de Irán contra la base aérea estadounidense de Al Udeid, en Catar, considerada la mayor instalación militar de Estados Unidos en la región.
Aunque el gobierno catarí aseguró que las defensas interceptaron el ataque sin víctimas, Baréin, Irak, Emiratos Árabes y Kuwait anunciaron el cierre de su espacio aéreo como medida de precaución.
Lea más: Irán cruzó una línea roja: disparó misiles contra bases de Estados Unidos en Catar e Irak
El cierre aéreo ocurre en momentos de máxima alerta, luego de que Catar calificara el ataque iraní como una “violación flagrante” de su soberanía.
Las embajadas occidentales en Doha recomendaron a sus ciudadanos resguardarse, mientras Qatar Airways detuvo temporalmente sus operaciones y otras aerolíneas internacionales comenzaron a redirigir o cancelar vuelos hacia Dubái, Doha y Baréin.
Baréin, Irak y Kuwait bajan la cortina en el cielo
La Dirección de Aviación Civil de Baréin suspendió el tráfico aéreo de forma inmediata, señalando que la decisión responde a “la evolución de la situación regional” y que se mantiene en coordinación con agencias internacionales para garantizar la seguridad de la población.
En Irak, el portavoz del Ministerio de Transporte, Maitham al Safi, confirmó el cierre del espacio aéreo, incluyendo la región sur, fronteriza con Irán y el Golfo Pérsico. En paralelo, la base de Ain al Asad —donde hay presencia militar estadounidense— fue puesta en estado de alerta.
Por su parte, la Aviación Civil de Kuwait también cerró su cielo “hasta nuevo aviso”, exhortando a los pasajeros y aerolíneas a seguir las actualizaciones y acatar las instrucciones oficiales.
Siga leyendo: ¿Qué pasaría si Irán cierra el estrecho de Ormuz? La amenaza que podría sacudir el petróleo y la economía global
Aunque la ofensiva de Irán no dejó muertos ni heridos en Catar, el gobierno del emirato expresó su condena. “Consideramos el ataque contra la base aérea de Al Udeid una violación flagrante del derecho internacional”, declaró el vocero de Exteriores, Majed Al Ansari, quien además advirtió que Catar “se reserva el derecho a responder”.
Catar suspendió su tráfico aéreo como medida preventiva, lo que afectó directamente a Qatar Airways, una de las aerolíneas más importantes del mundo, con más de 140 destinos globales y conexiones clave entre Asia, Europa y América.
Aerolíneas internacionales ajustan rutas ante creciente riesgo
El efecto dominó del cierre aéreo se hizo sentir rápido. Singapore Airlines, British Airways y KLM suspendieron vuelos a Dubái, uno de los aeropuertos más transitados del planeta.
British Airways incluso desvió un vuelo a Dubái hacia Zúrich y regresó otro avión a Londres desde Egipto.
Otras compañías, como Japan Airlines y Air India, comenzaron a evitar el espacio aéreo del Golfo Pérsico y Omán. En tanto, los grandes bancos japoneses, como Mitsubishi UFJ, activaron planes de evacuación para sus empleados en la región.
Entérese más: Lo que se sabe sobre los potentes ataques de EE. UU. a instalaciones nucleares de Irán
Según Bloomberg Intelligence, aerolíneas como IndiGo, Turkish Airlines y British Airways están entre las más expuestas si el cierre se prolonga. Los analistas advierten que una interrupción sostenida en el Estrecho de Ormuz y los cielos del Golfo tendría efectos globales en el transporte aéreo y los costos logísticos.
Los mercados reaccionaron. Las acciones de Air France-KLM, Lufthansa, IAG (matriz de British Airways), United Airlines y Delta cayeron este lunes.
El temor a un conflicto extendido —y costoso— para las aerolíneas comienza a tomar forma, justo cuando el sector intentaba consolidarse tras la pandemia.
“Todo depende de cuánto dure esto”, advirtió Ziad Daoud, economista jefe de Bloomberg Economics. “Una suspensión aérea de uno o dos días tiene poco efecto, pero si se prolonga, es otro cantar”.
Además lea: ¿Podría el ataque de EE. UU. a plantas nucleares de Irán desatar una Tercera Guerra Mundial?
Antes de esta crisis, los vuelos ya evitaban pasar por Israel, Siria, Líbano, Jordania, Irak e Irán debido a la inestabilidad. Ahora, con los cielos de Catar, Kuwait, Irak y Baréin cerrados, las alternativas para volar sobre Medio Oriente se reducen drásticamente.